Patrimonio
Generalitat y Puerto estudian mantener la muestra 'Tarraco' en el Moll de Costa
El MNAT ha perdido el cincuenta por ciento de visitantes desde el cierre de la sede de plaza del Rei
La Generalitat y el Puerto de Tarragona estudian mantener un espacio para el Museu Nacional Arqueològic de Tarragona (MNAT) en el Moll de Costa, una vez el equipamiento recupere su ubicación habitual, en el edificio de la plaza del Rei. El inmueble está cerrado por obras y, posteriormente, se hará una nueva museización, con lo cual se estima que no se reabrirá al público hasta principios de2023. Mientras tanto, el MNAT continuará en el Tinglado 4, propiedad del Puerto. La directora del MNAT, Mònica Borrell, manifestó ayer que el cambio de sede ha hecho caer a los visitantes en un 50%, principalmente porque la zona costera se encuentra alejada de los circuitos turísticos, centrados en la Parte Alta.
A pesar del descenso de visitantes, Borrell hace un balance muy positivo de la estancia en el Mollde Costa. La directora destacó que la principal ventaja es que les permite «tener un espacio donde se realice la actividad ordinaria del museo». En el Tinglado 4, el MNAT continúa abierto a los visitantes, impulsa actividades escolares, ciclos especiales y colabora con producciones de Tarraco Viva. Lo hace a partir de una exposición sobre la Tarragona romana «amable y atractiva» que repasa diferentes elementos de la ciudad y que incluso expone algunas piezas que hasta ahora no se habían mostrado. Un ejemplo es un fragmento de un altar encontrado en el Anfiteatro, que formaba parte de un tipo de capilla en el cual iban los gladiadores a encomendarse a los Dioses antes de salir a la arena.
Borrell no descarta alargar la relación con el Puerto y que se mantenga parte de la colección del MNAT en el Moll de Costa. Una posibilidad que tampoco ven con malos ojos desde la institución portuaria, si bien reconocen que se tendrá que hablar en el futuro y analizar cómo se podría articular la propuesta cultural.
Las obras, a buen ritmo
El edificio de la plaza del Rei cerró puertas en abril del 2018 para proceder a la mejora de la instalación, pero las obras no empezaron hasta septiembre del 2019, y está previsto que duren dieciocho meses. El proyecto es financiado por el Ministerio de Cultura, titular del edificio, y las obras tienen un presupuesto de unos 3,5 millones de euros. Por ahora, según Borrell, «avanzan a buen ritmo y se desarrollan dentro de la normalidad». La directora del MNAT explicó que la reapertura pide recibir la obra a principios del 2021.
A partir de aquí, habrá que hacer «una restauración de grandes piezas, como el mosaico de los peces y la muralla del sótano». Una intervención que «llevará unos meses porque no son proyectos sencillos». «A partir de aquí sí que entramos en la producción de la museografía, que es un año y medio más,» concretó Borrell. La previsión es reabrir la sede de la plaza del Rei «a finales del 2022 o principios del 2023».
Sobre las obras que se están llevando a cabo, Borrell dijo que «la reforma busca respetar al máximo la estructura», sin embargo «se tendrán que hacer algunos cambios para cumplir con la normativa antiincendios».
Una exposición más tecnológica
Donde sí que habrá una renovación está en la colección que se expone. «Intentaremos incorporar algunas piezas que no son visibles y presentarlas con una contextualización y relación entre ellas diferente», comentó Borrell, quién añadió que «la nueva exposición quiere romper con aquel museo de los años 60 organizado por áreas temáticas, y que explique el alma de la capital romana que fue Tarraco». Para conseguirlo, se introducirá de una manera más clara la tecnología. Desde hace unos meses se trabaja con un proyecto de documentación en 3D de diferentes piezas del museo. Una iniciativa de la Agència Catalana del Patrimoni Cultural(ACPC) que tiene como objetivo conseguir información útil para la investigación y el estudio del mundo romano, así como para la generación de nuevo contenido divulgativo. Por ejemplo, para que el visitante vea algunos elementos en 3D para poder contextualizar mejor algunos aspectos.