Urbanismo
La red urbana de Tarragona no está preparada para la «nueva normalidad»
Un estudio del geógrafo tarraconense Eduard Ferrer Torres determina que el 56% del núcleo urbano no ayuda a respetar la distancia de seguridad recomendada
«Teniendo en cuenta que la distancia de recomendación entre las personas es de dos metros y que cada una ocupa, en horizontal, una superficie aproximada de 0,5 metros, se calcula que la anchura ideal mínima para el tráfico del peatón sería de tres metros», dice el geógrafo.
Part Baixa y Vía Augusta en la cola
Las dos zonas con las calles más estrechas según el estudio son los barrios marítimos y los alrededores de la Vía Augusta, con un 70% y 78% del espacio destinado al peatón inferior a los tres metros, respectivamente. Con respecto a los barrios marítimos, la zona del Serrallo hasta Vidal i Barraquer y Pere Martell, hay un 44% de aceras inferiores a los dos metros y un 26% de entre dos y tres. Por lo tanto, sólo hay un 30% de calles suficientemente anchas para poder pasear sin romper los dos metros de seguridad y, en buena parte, se encuentran en el Moll de Pescadors y en el Moll de Costa. En la zona de la Vía Augusta, aunque «se trata de una de las zonas más acomodadas de la ciudad», tal como expone Ferrer, sólo un 22% de las calles superan la amplitud de los tres metros. Con respecto a las tres zonas restantes, la Part Alta tiene un 37% de espacio destinado al peatón con más de tres metros, la zona de la avenida Catalunya un 38% y la Rambla Nova un 57%. Con respecto a este último lugar, hay un largo recurrido desde la plaza Imperial Tàrraco hasta el Balcón del Mediterráneo con un amplio abanico de calles superiores a los tres metros y eso hace que sea la tercera zona con mejor balance de calles que ayuden a respetar el distanciamiento social. Así pues, según el estudio de Eduard Ferrer Torres, Tarragona suspende en la oferta de la red urbana destinada al paso de peatones, teniendo en cuenta las condiciones mínimas de distanciamiento físico de dos metros entre personas, con un 44% de las calles globales con una anchura superior a los tres metros. Desde el consistorio ya se han empezado a tomar medidas al respecto, como cerrar el paso de vehículos en la Rambla Nova o en el Paseo Rafael Casanova de manera provisional el fin de semana. El Ayuntamiento está estudiando una nueva red urbana donde los peatones tomen todavía más protagonismo y se permita respetar la distancia de seguridad recomendada por Sanidad.