El Ayuntamiento quiere a una persona por cada 10 metros cuadrados de playa
La previsión es que los usuarios puedan estar un máximo de tres horas consecutivas
El Ayuntamiento de Tarragona está planificando el uso de las playas de la ciudad en función de la normativa que se deriva del estado de alarma por la COVID-19. De las medidas en las cuales trabaja, destaca la posibilidad de que sólo haya un usuario cada diez metros cuadrados y no uno cada cuatro, y que este no pueda permanecer más de tres horas consecutivas en la playa, como recomendación, con la finalidad de poder dar cabida a toda la gente que quiera ir.
Manel Castaño, concejal de Seguridad Ciudadana y Protección Civil, manifestó ayer miércoles en esta redacción que «pensamos que cuatro metros cuadrados por persona es poco y que es más seguro de que sea una por cada diez metros cuadrados». No obstante. Castaño matizó que «la decisión no está tomada y quizás los metros cuadrados queden en cinco o seis». El concejal indicó que los ingenieros del Ayuntamiento están realizando cálculos de la posible ocupación. En este sentido, puso como ejemplo la playa de la Arrabassay dijo que «si aplicamos la fórmula de cuatro metros cuadrados, caben unas 2.500 personas y, si es la de diez, el número de usuarios baja a poco más de un millar».
Por otra parte, Castaño anunció un acuerdo a fin de que «la Guardia Urbana controle la Llarga, Arrabassada y la Savinosa», mientras que los Mossos d'Esquadra se encargarán de «la Móra y Tamarit», y la Policía Portuaria «del Miracle». Por su parte, Protección Civil recorrerá las diferentes playas del término municipal «para hacer una ronda y recordar las medidas de seguridad por megafonía».
Castaño recordó que el Ayuntamiento también trabaja en una App para controlar el número de usuarios de las playas. «Pensamos que estará en funcionamiento la segunda quincena de junio y, mientras tanto, se hará un control visual». Este sistema dispondrá «de una especie de semáforo» que indicará al ciudadano si el aforo de la playa está lleno, disponible o que el bañista podrá acceder en cuestión de unos minutos. A la espera de que llegue la aplicación, en el momento que se detecte un número elevado de usuarios «cerraremos la playa», dijo entre comillas Castaño.
Por otra parte, el Ayuntamiento todavía trabaja en la posible ampliación de las terrazas de los chiringuitos de las playas tarraconenses.