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El alto volumen de ventas da oxígeno en las librerías en los primeros días de desconfinamiento

Las librerías La Capona, Saltamontes Libros, Empúries, la Memoria y la Documenta desgranan en el ACN los motivos

La librera de Al·lots, Paula Jarrín, recomienda libros infantiles a dos clientes desde la entrada de la librería.

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Los libreros han recibido con «sorpresa» el alto volumen de ejemplares que están vendiendo y la afluencia de clientes a las librerías en los primeros días de desescalada. «Desde el minuto uno que vendemos libros», afirma en declaraciones en el ACN a la presidenta del Gremio de Libreros, Maria Carme Ferrer. Las compras en línea encargadas durante el confinamiento y, en especial, por Sant Jordi; el apoyoa la librería de proximidad; el uso de las redes sociales y la reciente publicación de novedades son algunos de los motivos que explican las ventas, tal como lo relatan al ACN La Capona de Tarragona, Saltamartí Llibres de Badalona, Empúries de Girona y la Memoria y la Documenta de Barcelona. Sin embargo, admiten que está lejos de las cifras de un Sant Jordi «normal».
La presidenta del Gremio de Libreros ha explicado que desde que han abierto las librerías, e incluso en la época de la cita previa, han visto que los clientes han empezado a ir a las tiendas de libros a comprar y preguntar también como están porque están preocupados por su futuro. Sin embargo, reconoce que no significa que se hayan recuperado las ventas de Sant Jordi. «Se está vendiendo mucho pero no quiere decir que se recupere todo lo que hemos perdido, ni mucho menos», insiste.

Ferrer apunta que desde el minuto uno los clientes han ido a comprar a las librerías para que les recomienden libros y para estar a su lado. «Estamos muy contentos y muy sorprendidos» de la reacción de los lectores. «No nos lo imaginábamos, incluso hay gente que no sabíamos que era tan adicto y que amaba tanto a los libreros», añade.

La también responsable de la librería Empúries de Girona apunta que los primeros clientes que fueron a la librería fueron los amigos, pero después han ido la gente del barrio que se sienten «responsables de sacar la librería adelante». «En las circunstancias actuales pensábamos que a la gente no entraría en las librerías e igualmente vienen», indica.

La Memoria de Barcelona

Xavier Cortés, de la Memoria de Barcelona, apunta que ha estado muy positivo el apoyorecibido a través de varias plataformas en línea para comprar libros y después recogerlos en las librerías. Las ventas por Internet han crecido de una forma importante durante la campaña de Sant Jordi, observación. Cortés estima que han facturado el 40% de lo qué harían normalmente en un mes de abril. El librero afirma que a partir del momento en que han abierto el tráfico de personas ha estado mucho más elevado de lo que es normal en un mes de mayo. Admite que en su caso se espabilaron porque no tenían página web y la crearon con 15 días. «El ruido con la web y las redes sociales ha repercutido positivamente».

Documenta de Barcelona

Eric del Arco, librero de la Documenta, explica que desde el día 4 de mayo abrieron la librería y notaron que «eso iba bien». Cree que se debe a que «la gente tiene ganas de salir y de gastar dinero, está harta de hacer siempre lo mismo y se le han acabado los libros». Asegura que «o tienes Netflix o tienes libros y hay un grupo de gente que son adictas a los libros y necesitan su dosis y han salido en tromba en las librerías con las ganas de poder ver los libros, que es muy diferente que comprarlos por Internet». Del Arco señala que a los libreros que han abierto los ha beneficiado mucho que haya otros que no lo han hecho. «Si no abre la Casa del Libro ni el FNAC ni las librerías de El Corte Inglés, los que hemos podido abrir nos hemos beneficiado de un grupo de gente que no podía ir a otro sitio».

El librero explica que al principio los sorprendió la reacción de los clientes, pero después han visto que la tendencia se mantiene. Del Arco cree que el del libro será «uno de los sectores beneficiados este verano porque viajar se tiene que ver si se podrá hacer y la gente que lee acabará yendo a las librerías». En este sentido, considera que la situación se alargará hasta agosto y que en septiembre se darán cuenta hasta donde llega la crisis.

Del Arco señala que evidentemente la pandemia del coronavirus y la crisis «ha sido un golpe muy duro. En el mes de marzo acabó a medias y en abril con la tirada de Sant Jordi se ha hecho un poco de caja. Yo calculo que hemos vendido un 15% de lo que habríamos facturado con el Sant Jordi todo el mes de abril. Este está siendo un mayo normal y venimos de lo que vendíamos, es flipante».

Saltamartí

Sílvia Muntané, de Saltamartí Libros de Badalona, explica que desde el primer momento «quedaron muy alucinados por la cantidad de pedidos en que recibieron a través de la web, ha estado impresionando la cantidad de visitas que hemos tenido», añade. «La gente que no había salido de casa en este tiempo, la primera salida que han hecho fue para venir a la librería». Sin embargo, Muntané admite que está muy lejos de una venta normal pero están contentos con la cantidad alcanzada.

Explica por ejemplo que hay gente que les hace compras de libros y que reconocen que no tienen ninguna prisa para tenerlos porque es su manera de colaborar con la librería. «Hemos tenido gestos que te llenan totalmente», asegura Muntané.

La Capona

Ricard Espinosa, uno de los socios de La Capona de Tarragona, señala que «para ser el mes de mayo hay una afluencia más acentuada que otros meses de mayo anteriores». Considera que se debe a los pedidos de Sant Jordi que empezaron a entregar el 4 de mayo y que los clientes todavía recogen estos días. «La gente está comprando más libros que un mayo habitual».

En cualquier caso, afirma que eso no tiene nada que ver con las ventas de Sant Jordi, aunque las compras de estos días han ayudado a que la situación «no sea tan grave. Todo eso suma y ojalá que continuemos hasta septiembre a que la afluencia de las librerías sea notable. Sería un gran Sant Jordi anual que es lo que nos interesa a todos». La mayoría de clientes que se acercan a La Capona «son habituales, algunos recuperados y otros nuevos».

Más vendidos

Las librerías consultadas explican al ACN que entre los libros más vendidos hay 'Mar de verano' de Rafel Nadal y la biografía de Woody Allen como novedades más recientes y otras obras como 'Canto yo y la montaña baila' de Irene Solà, 'Boulder' de Eva Baltasar y 'La madre de Frankenstein' de Almudena Grandes. Asimismo, como destaca Ferrer también se han vendido muchos libros de fondo que los libreros han recomendado. «Son libros por los cuales nosotros apostamos y tenemos en nuestros estantes». «No ha sido una venta normal de Sant Jordi sino especial», añade Espinosa.

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