La plantilla de Lidl en Tarragona no secunda la huelga y CCOO denuncia «miedo a las represalias»

Primera huelga después del inicio de la pandemia y primer toque de alerta. La plantilla de Lidl en Tarragona no han hecho un seguimiento mayoritario de la convocatoria inicialmente secundada por CCOO y UGT y de la cual este segundo sindicado se ha bajado a última hora. Denuncian desde hace días «sobrecarga de trabajo» y falta de seguridad en plena crisis sanitaria, así como el incumplimiento del acuerdo que llegaron con la empresa antes de la desescalada en lo referente a las remuneraciones. Aun así, según asegura Leire Rico, delegada de CCOO, hay trabajadores que habrían tenido «miedo a las represalias» de las tiendas donde trabajan, en las cuales en los últimos días se habrían llevado a cabo reuniones «uno por uno» para convencerles de que no participaran de la huelga. «Yo lo único que sé es que el domingo todo el mundo hacía huelga y al final sólo hemos sido dos o tres», se lamenta Leire Rico. Y es que, tal como detalla, buena parte de los contratos en estos supermercados son de aproximadamente media jornada y dependen de horas extras para llegar a un salario mínimo. Este sería también el principal motivo de la falta de asistencia al piquete informativo que se ha llevado a cabo este jueves en las puertas del establecimiento que esta cadena alemana tiene en el polígono comercial de Les Gavarres, en Tarragona. «Ya nos lo esperábamos», reconoce Rico, que aun así destaca que en otros lugares del Estado –la convocatoria era para toda la plantilla de Lidl en España excepto el País Vasco– sí que ha tenido éxito y se han tenido que cerrar tiendas por falta de personal.

Conflicto de buena mañana

El único momento tenso de la jornada de huelga en Tarragona se ha producido a las 11 de la mañana, cuando poco después del inicio del piquete informativo la jefa de zona de Lidl ha ordenado que no realizaran la actividad sindical dentro de los terrenos de la compañía, es decir, que se pusieran fuera del aparcamiento, en la calle. Esta petición no ha sido aceptada por CCOO, quien se ha quedado a las puertas de la tienda hasta la llegada de los Mossos d'Esquadra. La policía ha hablado con la empresa y finalmente se les ha permitido continuar hasta la una de la tarde.