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El sector del autobús protesta y pide unos ERTE más flexibles

Cerca de una treintena de vehículos han hecho una marcha lenta que ha finalizado a la Imperial Tarraco

Una larga hilera de autocares en la avenida Roma, a punto de acceder a la plaza Imperial Tarraco.

El sector del autobús protesta y pide unos ERTO más flexiblesOlívia Molet

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Una veintena de empresas del sector del transporte de viajeros, de las aproximadamente treinta que hay en las comarcas de Tarragona, han participado hoy miércoles por la mañana en una marcha lenta que ha finalizado en la plaza Imperial Tarraco. El colectivo ha informado de que el paro a causa de la pandemia de la COVID-19 les ha hecho caer la facturación a un 80 por ciento. En la convocatoria de Direbús han participado 27 vehículos, que en todo momento han llamado la atención de los peatones haciendo sónar las bocinas. La marcha se ha hecho bajo el lema «Salvemos el autocar». Acciones como esta se han llevado a cabo en diferentes ciudades de Cataluña.

Los representantes de Direbús han entrado al registro de la Subdelegación del Gobierno un escrito dirigido al gobierno del Estado donde plantean sus reivindicaciones.

Josep Saladié, representante del grupo de profesionales que ha participado en la marcha lenta, ha manifestado que la paralización del servicio que realizan de manera habitual, como pueden ser desplazamientos de equipos deportivos, personas mayores y turistas, o rutas escolares, les ha generado grandes pérdidas económicas. Saladié ha dicho que las empresas vinculadas a Direbús dan trabajo a unas 2.000 personas en las comarcas tarraconenses y ha remarcado que se trata de compañías «familiares». Saladié ha afirmado que este año «sólo podremos facturar un 20 por ciento» de lo que sería normal.

El portavoz del colectivo ha manifestado que «las empresas de autobuses que hacen líneas regulares siguen funcionando, pero los que nos dedicamos al servicio discrecional y turístico tenemos cero ingresos desde hace muchos meses». Los profesionales del sector reclaman ventajas fiscales, una flexibilización de los ERTE, la rebaja del IVA del 10 al 4 por ciento y poder negociar con los bancos carencias en los contratos de leasing. Saladié ha subrayado que «cada vehículo que tenemos en leasing supone unos 4.000 o 5.000 euros al mes y, cuando llevas tres meses sin ingresos, eso cuesta de aguantar». El portavoz del colectivo ha añadido que «hemos perdido los meses más fuertes de una temporada que empieza a la Semana Santa y llega hasta finales del verano».

Un conductor ha explicado a esta redacción que episodios como el temporal Glòria «también nos ha generado pérdidas importantes», por lo cual considera que «si no se aceptan nuestras peticiones, este año lo podemos dar casi por perdido desde el punto de vista económico».

Conductores y trabajadores de empresas de autocares de la demarcación de Tarragona concentrados ante|delante de la subdelegación del gobierno español.

Marcha lenta de autocares en Tarragona reclamando mejoras laborales en el sectorACN

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