El arzobispo de Tarragona lamenta que algunos ancianos han muerto «literalmente abandonados»
Planellas carga contra residencias que sólo buscan «negocio» y pide reflexionar sobre la situación de los mayores
El arzobispo ha asegurado también que, en algunos casos, la realidad desmonta las argumentaciones que defienden que las residencias eran «unos espacios ideales donde las personas mayores iban porque prefería tener la vida solucionada, la comida a punto y la cama arreglada». «A la hora de la verdad, nuestra sociedad opulenta y del bienestar, atada al mismo tiempo a una bajada de la natalidad, a una cultura urbana y a la emancipación de las generaciones jóvenes, ha ido rompiendo el ciclo natural de la solidaridad generacional. Esta ruptura ha comportado en ocasiones confinar en geriátricos a nuestras personas mayores, después de haberlos exprimido», ha alertado.
«Hay personas dependientes que, generalmente, después de grandes renuncias y sufrimientos, la única alternativa viable es ingresarlos en una residencia. Sin embargo, por otra parte, también hay muchos ancianos, con buena movilidad de cuerpo y de cabeza, que son llevados, porque se considera la mejor solución, la mejor que la familia se inventa simplemente para conseguir un grado mayor de unmal llamado 'libertad'», recoge la carta dominical.