Los rebrotes y la amenaza de nuevos confinamientos reactivan la demanda de atención psicológica
Los profesionales piden evitar las «pseudoterapias» y el autoconsumo de fármacos
Según el psicólogo, hay que hacer todo lo posible para que la pandemia nos pase «la menor factura emocional» posible. La clave , apunta, es la gestión emocional e intentar dar otro enfoquea aquellas situaciones que nos generan malestar. «Hay que convertir las preocupaciones que tenemos en problemas con el fin de poder abordarlos», subraya.
Uno de los ámbitos con una demanda creciente es el de la pareja porque situaciones como la del confinamiento lahan puesto a prueba, y han propiciado la aparición de conflictos y de problemas. El motivo, apunta Díaz, es que a menudo se cae en el error de intentar apartar los problemas de pareja o no ocuparse, en lugar de intentar resolverlos.
En general, el psicólogo aconseja más flexibilidad, empatía y mejorar la comunicación. «Si tengo algún problema lo tengo que saber comunicar, pero no en forma de explosión emocional. Porque, así, el otro no lo recibirá», reflexiona.
Las vacaciones se presentan como una buena opción para desconectar, pero Díaz avisa de que la información relacionada con la covid «nos perseguirá vayamos donde vayamos». «Hay que tener momentos para informarnos, si hace falta, pero también aumentar los momentos de esparcimiento, recuperar el ocio y los contactos con familiares y amigos, siempre respetando la distancia y las medidas de seguridad», expone.
Uno de los colectivos que más preocupan es el de los sanitarios y, en general, el personal de emergencias, que ha sufrido un gran «desgaste». Tener que hacer frente a una pandemia sin precedentes y la incertidumbre de lo que vendrá agravan una situación «de estado de ánimo bajo» y hay casos que presentan «una afectación psicológica importante». «Si quieres cuidar, te tienes que cuidar a ti mismo primero. Hay mucho trabajo porhacer», subraya Díaz.
Conductas obsesivas
El psicólogo explica que también detectan adolescentes con síntomas de ansiedad, pero no tanto por la situación de la pandemia, que en general dice que han afrontado suficientemente bien, sino por la incertidumbre de cómo será el próximo curso escolar. También van al alza los problemas de dependencia del móvil, que en algunos casos pueden derivar en una adicción.
Además, el miedo al contagio también ha hecho aflorar algunos trastornos obsesivos compulsivos que quizás estaban latentes en algunas personas. En general, los psicólogos ven casos mayoritariamente en adultos, pero les ha sorprendido el aumento en adolescentes, dónde no son tan habituales. «Hay miedo a contaminarse o a poder contaminar al otro, y a partir de esta obsesión se desarrollan conductos de comprobación y de limpieza de forma compulsiva», relata Díaz.
Ante estas situaciones los psicólogos piden «huir» de las terapias o procedimientos «que no estén bien regulados». «Están surgiendo muchas pseudoterapias que se aprovechan de la gente cuando está más vulnerable, como es este momento», avisa Díaz. Además, los profesionales hacen un llamamiento a evitar el autoconsumo de fármacos para controlar los estados psicoemocionales. «Con terapia o con una asistencia correcta se pueden solucionar», defensa.
Depresión en deportistas de élite
En la vertiente de la psicología del deporte y de la actividad física, los psicólogos están viendo un aumento de casos de depresión y de ansiedad en atletas de alto rendimiento. Se trata de deportistas que llevaban mucho tiempo preparándose para la temporada y que, finalmente, han visto como las olimpiadas o las finales de un campeonato se han anulado.
Eso, explica el psicólogo, hace pensar que, aparte del alto rendimiento, algunos de ellos «no han dedicado mucha atención a las otras áreas de la vida donde se podrían acoger en estos momentos». «Por eso incidimos que esta preparación no tiene que ser sólo deportiva, sino que tiene que ser siempre global para poder rendir al máximo», cierra.