La actitud 'hooligan' de un grupo de 40 personas obliga a suspender un concierto de Sant Magí

Los organizadores del Imaginada se vieron obligados a suspender, anoche, un concierto de hip hop en el auditorio del Camp de Mart porque un grupo de 40 jóvenes se negó, en más de una ocasión, a seguir las medidas de seguridad para evitar el contagio de la covid-19.

El espectáculo de Dolor Garcia y Toque Toque Birds empezó a la hora prevista. Fue entonces cuando, al ver que el numeroso grupo no cumplía con la distancia de seguridad, dejando una silla vacía, ni tampoco llevaban la mascarilla puesta, dos voluntarios de la organización se acercaron y los pidieron que siguieran las normas. Los jóvenes no hicieron caso en ninguna de las diversas veces que se les llamó la atención e, incluso, los cantantes les pidieron que cumplieran con las normas establecidas.

Según Manel Torres, miembro de la organización de la Imaginada, la actitud de aquellas personas era más propia de un campo de fútbol que de un concierto. Torres lamenta, a más que algunas de las personas del grupo, llegaron a hacer comentarios sexistas muy inadecuados. Fue entonces cuando se decidió activar el protocolo de Punt Lila i Multiculor para estos casos. Al ver que eran muchos y que no hacían caso a ninguna de las indicaciones de la organización, explica Torres, decidieron que lo mejor era detener el concierto y desalojar a los más de 500 asistentes al acontecimiento. «Valoramos que era la mejor opción, en lugar de echarlos a ellos, ya que no queríamos crear mal ambiente,» explica el joven.

No obstante, Torres celebra que el resto de actos de la Imaginada se hayan podido celebrar correctamente, «y más en estos momentos que vivimos, en los que se han tenido que cancelar muchos acontecimientos culturales».

Ricomà lo presenció

Los organizadores publicaron en su canal de Twitter lo que había pasado. «Ayer sábado por la noche al concierto de Dolor García & Toc Toc Birds nos vimos obligadas a suspender el espectáculo por el incumplimiento de los protocolos de la covid-19 y GSDfòbiques», decía. Un tuit que, precisamente, fue respondido por el alcalde Pau Ricomà. «Fui testigo del esfuerzo de los organizadores de la Imaginada para el cumplimiento de todos los protocolos y les estoy muy agradecido. Una minoría que no sabe distinguir hacer de hooligans en un campo de fútbol y estar a un concierto no puede estropear el trabajo de los músicos y organizadores», decía el alcalde, lamentando los hechos.