El nivel de dióxido de nitrógeno diario bajó un 60% en el confinamiento
Este contaminante está directamente asociado a la actividad del tránsito rodado y a procesos industriales
La calidad del aire mejoró considerablemente durante todo el estado de alarma en el Campde Tarragona. El descenso brusco del tráfico de vehículos a causa del confinamiento por las restricciones en la movilidad de los ciudadanos y la reducción de la actividad industrial produjo, cuanto menos, un efecto directo sobre las concentraciones diarias de dióxido de nitrógeno (NA2 ), un contaminante asociado directamente a estas dos actividades.
Los niveles diarios de dióxido de nitrógeno (NO2 ) se redujeron una media aproximada de más del 60% desde la declaración del estado de alarma, según los datos registrados por las diferentes estaciones de la Red de Vigilancia y Prevención de la Contaminación Atmosférica (XVPCA) y que ha recogido el informe del Síndico de Agravios de Cataluña en su informe Salud y derechos en la crisis CV-19. De acuerdo con los datos del mismo informe y recogidas desde la estación de medición de Reus, los últimos días del estado de alarma la reducción se situó en el 75% en el Camp de Tarragona.
De hecho, la reducción de los niveles de dióxido de nitrógeno fue generalizada en toda Cataluña, según los datos del Departamento de Territorio y Sostenibilidad. Algunos días el descenso llegó a ser de entre el 70 y el 80%, con estaciones que han reducido más del 90% del NO2 con respecto a la media de los últimos cinco años en un mes de marzo. La reducción, sin embargo, osciló, ya que la concentración de óxidos de nitrógeno también depende de las condiciones meteorológicas, y los días que hay una mejor dispersión, las concentraciones bajan. «A pesar de los efectos devastadores de la pandemia, paradójicamente ha tenido una cara positiva cómo es la mejora generalizada del medio ambiente, no sólo por lo que es objeto de este estudio, la contaminación del aire, sino también para otros sectores: disminución de la generación de residuos, una disminución de la contaminación acústica de nuestras calles, pueblos y ciudades, disminución de los gases con efecto invernadero provocados por las industrias, etc. Si bien en estos momentos el objetivo prioritario es la lucha contra la pandemia, una vez superada esta situación de crisis, como sociedad, tenemos que ser capaces de extraer conclusiones», concluye el Síndico de Agravios ante el descenso de la contaminación.