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Carles Castillo dice que escuchará las ofertas que ha recibido de otros partidos

El diputado tarraconense explica que dejará el escaño si Iceta se lo pide

El diputado del PSC en el Parlament, Carles Castillo, con Pep Andreu y Miquel Iceta, desde el Pont Nou para ver el alcance de la crecida del Francolí.

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Carles Castillo, que el lunes rompió el carné del PSC por la «deriva» que considera que ha tomado el partido, ha explicado que ha recibido ofertas de otras formaciones y que las escuchará. En una entrevista enCatalunya Ràdio, Castillo ha dicho que entrar en otra formación es «una posibilidad» y que tiene «varias llamadas de varios colectivos», que escuchará «educadamente». Aún así, admite que ve «todas las posibilidades abiertas, incluso dejar la política». De momento, Castillo mantiene el escaño pero se compromete a dejarlo si el presidente del grupo parlamentario del PSC-Units, Miquel Iceta, se lo pide.

Castillo ha explicado que él ha sido siempre una persona «de partido» y que defiende que el escaño pertenece al partido. Por eso lo dejará de manera inmediata si el PSC se lo pide o si no consigue pactar con el grupo parlamentario «una situación sin tensión ni mal rollo, que sé que es difícil».

El diputado ha dicho que decidió dejar la militancia con el PSC porque ya no puede defender más «cosas que no creía». «La gente me paraba en la calle y me reprochaba cosas, y yo incluso estaba de acuerdo con algunos de los reproches», ha reconocido. Entre las cuestiones que lo han hecho tomar esta decisión hay «el ritmo en que actúa el gobierno español al no sacar la reforma laboral del PP o la Ley Mordaza» o las cuestiones referentes a la monarquía. «No puedo soportar decir que tenemos alma republicana pero defendemos la monarquía. No tengo estómagopara decir eso. Es reírse de la ciudadanía», ha lanzado, después de considerar que una parte del PSC es «poco valiente».

Castillo, que ha visitado a los políticos encarcelados, también ve en este asunto un desajuste entre su posicionamiento y el de partido. «Una parte de la dirección se lo tomó muy mal», ha admitido, en referencia a la visita que hizo a Oriol Junqueras. «No entiendo el pesar enir a visitar a los compañeros de trabajo con quien discrepamos», ha comentado el diputado, que tiene una conversación pendiente con Iceta que espera se produzca en las próximas horas.

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