Movilidad
Renfe restablecerá las frecuencias de Avant entre Lleida, Tarragona y Barcelona
Lo hará el próximo 21 de septiembre, ya que había habido quejas de los usuarios que las utilizaban
estación del Camp de Tarragona, tren. AVE
Desde que se recortaron las frecuencias durante el confinamiento por la covid-19, usuarios leridanos y tarraconenses de estos trenes que cada día los utilizan para ir a trabajar a Barcelona se habían quejado en reiteradas ocasiones. A pesar de no estar constituidos oficialmente en ninguna plataforma, aseguran que son unos 200 en un grupo de Whatsapp donde comparten quejas e inquietudes. Conxita Font vive en Lleida y hace 13 años que va cada día a trabajar a Barcelona con el Avant de las siete de la mañana. Cuando huboel confinamiento empezó a hacer teletrabajo pero ahora estaba preocupada para cuando llegaría el día que le pedirían volver en el lugar|sitio presencial, ya que no veía con ánimos de ir cada día en Barcelona en coche y si no cogía el tren de primera hora no llegaría a tiempo en el trabajo.
El mismo caso es el de Sònia Oriola, que a pesar de vivir en Torregrossa (Pla d'Urgell), apuesta para ir con el Adelante en Barcelona porque de esta manera no le hay que conducir tanto rato para llegar al trabajo. Ahora está combinando el teletrabajo con el trabajo presencial durante 3 días a la semana en la ciudad. Como las frecuencias actuales no le combinaban con los horarios del trabajo, había optado por ir a Barcelona en coche y también estaba preocupado para cuando llegará el invierno ya que el «cansancio del día a día es importante».
«Los abonos no salen rentables»
A pesar de la recuperación de las frecuencias de antes del confinamiento, los usuarios diarios de Adelante siguen reivindicando que los abonos no son rentables. Conxita Font lamenta que «Renfe no hace caso» de los clientes porque hace años que se quejan que el sistema que plantea la compañía de abonos de 10 viajes a gastar en 8 días consecutivos es muy complicado de utilizarlo en su totalidad de manera que el cliente «siempre sale a perder».
Sònia Oriola añade que si se sigue implantando un sistema laboral que combina el teletrabajo con el trabajo presencial, los abonos tendrán que ser replanteados por la compañía porque|para que sino «no será viable ir en tren a Barcelona».