Restauración
El sector de la restauración de Tarragona volverá a pagar las tasas a partir del 1 de octubre
El Ayuntamiento mantendrá cortadas las calles que ocupan las terrazas hasta que se supere la situación «de excepcionalidad»
El Ayuntamiento de Tarragona volverá a cobrar la tasa de las terrazas y de ocupación de la vía pública en el sector de la restauración a partir del 1 de octubre, después de que quedaran exentos por la crisis sanitaria. El consistorio también mantendrá cortadas las calles donde se permite la ampliación de algunas terrazas para «favorecer» la actividad de la hostelería hasta que se revierta la situación «de excepcionalidad».
«El sector sabe muy bien que no arreglaríamos nada haciendo excepciones si el Ayuntamiento cada vez se hace más pequeño y más débil. Nos hace falta mucho Ayuntamiento para invertir con mucha fuerza en la ciudad», ha afirmado el portavoz del equipo de gobierno, Xavier Puig, este jueves, después de la mesa de trabajo con el sector.
El Ayuntamiento de Tarragona se ha reunido este jueves por la mañana con los representantes de la hostelería, la restauración y el ocio nocturno de la ciudad para consensuar nuevas medidas para afrontar la situación derivada de la pandemia. Durante seis meses, el sector se ha beneficiado de exenciones fiscales y no ha pagado las tasas de terraza y ocupación de la vía pública. Según Puig, los agentes económicos han entendido «perfectamente» que el consistorio vuelva a cobrar los tributos a partir de principios de octubre porque, dice, «son conscientes» del esfuerzo que ha hecho la administración pública para ayudarlos en los meses de crisis sanitaria. «El sector asume bien sus obligaciones y entiende que hay que colaborar para que el Ayuntamiento pueda seguir trabajando y apostando por el sector como punto estratégico de la ciudad», ha subrayado. Por este motivo, el sector pagará las tasas «correspondientes» en el último trimestre del año. Los impuestos serán los mismos, a pesar de que muchas terrazas han ampliado sus espacios.
A la vegada, se ha acordado mantener para uso exclusivo de peatones algunos de las calles de la ciudad donde bares y restaurantes han instalado terrazas. Esta medida se alargará hasta que no se supere la situación excepcional. Aparte, el Ayuntamiento y los empresarios se han emplazado a mantener una tabla de diálogo periódica para trabajar en la futura ordenanza.