Lo despiden e intenta matar a los propietarios de la empresa a golpes de hacha

El individuo sacó un hacha con el mango de madera de dentro de una mochila y, después de decir 'te mataré', se dirigió hacia el hombre y le clavó la hoja del hacha en la cabeza. Las dos víctimas empezaron a huir del procesado, que los perseguía mientras esgrimía el arma.

A pesar de eso, el procesado llegó a agredir a la mujer en la cara con el hacha, provocando que cayera al suelo, y se abalanzó con la intención de acabar con su vida. El marido, sin embargo, se pudo interponer con el fin de apartarlo y tanto él como el agresor acabaron cayendo al suelo. Finalmente, gracias a la intervención de terceras personas que acudieron a sus gritos de auxilio, pudieron deshacerse de él y el procesado huyó del lugar.

Como consecuencia de los hechos, la mujer sufrió una herida incisa-contusa en el labio superior y la fractura del radio izquierdo, las cuales tardaron 99 días en curarse –uno de los cuales estuvo hospitalizada y 30 fueron impeditivos para la realización de las ocupaciones habituales. Además, le haquedado una cicatriz de tres centímetros y secuelas derivadas de un estrés posttraumático moderado.

Por su parte, el hombre sufrió dos heridas incisivas-contusas en la cara y en la frente, diversas contusiones y estrés postraumático. El hombre tardó 100 días en recuperarse de las heridas, de los cuales 10 fueron impeditivos para la realización de sus ocupaciones habituales.

Inicialmente el juzgado de instrucción dejó al hombre en libertad con cargos, pero a raíz de un recurso de apelación de la acusación particular la Audiencia decretó el ingreso provisional en prisión tres meses después. En concreto, está privado de libertad desde el pasado 30 de enero.

Según la fiscalía, los hechos constituyen dos delitos de homicidio en grado de tentativa por cada uno de los cuales pide 8 años de cárcel, así como la prohibición de acercarse o comunicarse con las víctimas durante 13 años. En concepto de indemnizaciones por lesiones y secuelas, reclama 15.000 euros para la mujer y 12.000 para el hombre.

Por su parte, la acusación particular considera que los hechos constituyen dos supuestos delitos de asesinato en grado de tentativa por cada uno reclama una pena de 10 años de cárcel.

El hombre quiere volver a cambiar de abogado

El acusado renunció hace un tiempo al abogado de oficio que le habían asignado y ahora vuelve a exigir que le designen otro porque considera que este tampoco se ha preparado bien su defensa, según han explicado a ACN fuentes judiciales.

Aunque el médico forense ha dictaminado este lunes que el hombre estaba en condiciones de declarar, la fiscalía y la acusación particular han pedido la suspensión de la vista a fin de que al hombre le hagan un análisis detallado de su estado mental. El tribunal ha acordado posponer la sesión hasta el 9 de diciembre.