Economía
La covid-19 obliga a replantear las cláusulas de los contratos de alquiler
La mayoría de inmobiliarias renegocian algunos acuerdos sobre la renta de los locales comerciales para adaptarse a la situación actual
La covid-19 está obligando a replantear muchos ámbitos de la sociedad y el sector de la inmobiliaria no es una excepción. En la demarcación de Tarragona cada vez es más frecuente que en los contratos entre las fincas y los inquilinos se apliquen cláusulas covid, que tienen que ver con posibles confinamientos, aforos limitados y otras medidas que se puedan ejercer mientras dure esta pandemia. De esta manera, aparte de renegociar contratos viejos, en los que son nuevos o se tienen que renovar ya se incluyen estos conceptos para las futuras medidas que se puedan derivar de la pandemia y que puedan comportar dificultades económicas para los inquilinos, como confinamientos totales que detengan la actividad por completo.
«Empezamos a aplicar algunas cláusulas covid, especialmente en los locales, ya que en las viviendas es poco habitual, casi no se ha tocado nada», expone al Diari Més Fabián Huguet, presidente del Colegio de Administradores de Fincas de la provincia de Tarragona, aunque puntualiza que «más que cláusulas, es que volvemos a negociar los contratos». Estas renegociaciones de los convenios pueden ser fruto de las medidas restrictivas que se pueden aplicar desde el Gobierno del Estado o el de la Generalitat, como por ejemplo pasó en marzo cuando se aplicó el confinamiento total. En esta línea, Emma Monlleó, de Fincas Tarragona, uno de los colegiados, expone que «hemos negociado los contratos porque tenemos mucha confianza mutua con nuestros clientes, mediem mucho y hemos hecho anexos a los contratos con acuerdos», y añade que «en el caso de los bares y restaurantes, cuando han tenido una limitación del aforo, también hemos hecho una nueva renta temporal adecuada a la situación».
Desde el colegio también detallan que entre estos nuevos acuerdos que se están aplicando ahora a causa del coronavirus hay «la prórroga y la reducción de las rentas». De hecho, comparten algún caso de locales comerciales de Salou donde «este año, la temporada ha sido nefasta y, con el fin de ayudarlos en su situación ya nos hemos puesto de acuerdo con algunas cláusulaspara el próximo año». También «tenemos en cuenta el funcionamiento que pueda tener aquella empresa en estos momentos, si bajan los beneficios un 50%, etc», afirman.
En las viviendas «es complicado»
Tanto desde el Colegio de Administradores de Fincas como desde Fincas Tarragona, coinciden en que negociar estas cláusulas en las viviendas es «complicado». «Tiene más lógica aplicar estas modificaciones en los locales que no en los pisos», dice Huguet, quien justifica que «las consecuencias de la pandemia se ven de manera más clara en un comercio». Además, «los propietarios de los pisos o las casas son más reticentes a la hora de negociar estos acuerdos, es más complicado gestionarlo en las viviendas», asegura Huguet. En esta línea, Monlleó cree que «estos acuerdos tienen más sentido en los pisos de estudiantes, ya que puede influir mucho más un posible confinamiento» y eso hace mucho más visible una de las consecuencias de la covid-19. En cambio, tal como argumentan desde el colegio, es más complicado saber con exactitud si la situación de alguna familia es provocada por la crisis de la covid-19 y como hacer un acuerdo que sea factible para ambas partes. Por otra parte, en otros lugares del país sí que se empiezan a aplicar estas cláusulas en las viviendas que, entre otros motivos, permiten rescindir el contrato antes de la fecha establecida sin ningún cargo.