Entran a robar en un local de la Asociación de Vecinos de la Granja

Vecinos de la Granja tiene cedido por el Ayuntamiento en la calle Gran Canària número 37 fue objeto de robo la madrugada del domingo al lunes. Los autores de los hechos forzaron la puerta de acceso. Los Mossos d'Esquadra se personaron a las 13 horas de ayer el lunes para levantar acta de lo que sucedió y, posteriormente, el presidente de la organización vecinal, Francisco Rosillo, presentó la correspondiente denuncia. Los ladrones también robaron en una academia de idiomas localizada en este barrio de Ponent.

Rosillo explicó a esta redacción que «el robo fue entre las 3 y las 5 horas de la madrugada, porque unos vecinos oyeron ruidos». «Cuando bajaron para ver que estaba pasando, los ladrones ya se habían marchado», dijo, para añadir que «los vecinos no se pueden arriesgar en una situación como esta».

Los mossos informaron, por su parte, de que los ladrones accedieron al interior del local haciendo la palanca en la puerta. En una primera inspección, Rosillo advirtió que los autores de los hechos cogieron «muchos metros de cable, elementos de alumbrado, toldos, mangueras, material diverso de la asociación y piezas de hierro». «Cogieron todo lo que pudieron y dejaron el local revuelto», apuntó el presidente de la asociación de vecinos. Después de una primera inspección ocular, Rosillo calculó que el valor del material robado «es, como mínimo, de 500 euros», aparte del coste de tener que arreglar la puerta de acceso al local. Rosillo explicó que la asociación destina el local de la calle Gran Canària «para hacer prácticas de teatro y actividades de baile, pero ahora, a causa de la pandemia de la covid-19, casi no hacemos nada y lo utilizamos como almacén».

«Un verano espantoso»

Francisco Rosillo manifestó que «en el barrio hay una sensación de inseguridad que preocupa a los vecinos». «Si las cosas no mejoran, la gente acabará saliendo a la calle para mostrar su malestar», dijo. Según el presidente de la entidad, «el pasado verano fue espantoso porque en la zona de la plaza de la Salut y del Parque Rodríguez de la Fuente se hacían botellades y se reunía gente joven haciendo ruido». De hecho, esta situación todavía se produce. «La noche del lunes fueron testigo de unbotellón», apuntó a Rosillo, quien dijo que «en las redes sociales los vecinos se quejan de la situación en que se encuentra nuestro barrio con relación a la inseguridad».