Parc Francolí exige más seguridad antes de que el CPO se ponga en marcha

La Asociación de Vecinos de Parc Francolí exige al Ayuntamiento de Tarragona que se ponga manos a la obra a las diferentes necesidades del barrio que se pusieron sobre la mesa en la última reunión que mantuvieron las dos partes, en noviembre de 2019, que pasan básicamente por una mayor sensación de seguridad arreglando el sistema de alumbrado, instalando más farolas en los puntos más oscuros del parque y aumentando la presencia policial en la zona. Unas reivindicaciones más necesarias que nunca con la entrada en funcionamiento del Centro Penitenciario Abierto (CPO), cuya construcción se encuentra ya en una fase bastante adelantada.

En este último encuentro de los vecinos con el consistorio, ahora hará un año, los miembros del gobierno municipal se comprometieron a actuar en la mejora del alumbrado, pero el presidente de la Asociación de Vecinos, Jordi Miguel, denuncia que «todavía no han hecho nada». Miguel defiende que «estas mejoras para reducir la sensación de inseguridad de la gente del barrio se tendrían que haber llevado a cabo antes de que empezara la construcción del nuevo Centro Penitenciario Abierto». Desde el barrio creen que el nuevo centro hará que aumente esta inseguridad, y más todavía si las carencias con respecto a la luz y a la vigilancia por parte de los cuerpos de seguridad continúa cuando entre en funcionamiento. Por eso, exigen ahora que el Ayuntamiento cumpla sus promesas y resuelva las necesidades del barrio en materia de seguridad antes de que el centro penitenciario se ponga en marcha.

«El alumbrado en el barrio es deficitario», critica a Miguel, que señala que «hace falta que se instalen farolas en muchas zonas del Parque que están a oscuras y que se arreglen algunos que se apagan frecuentemente, sobre todo entre el puente y la pista de fútbol, dejando parte del barrio a oscuras y tenemos que llamar a la empresa que lo gestiona para que lo solucione». Miguel lamentaba que desde la última reunión con el consistorio del noviembre pasado han entrado cuatro o cinco peticiones para volver a encontrarse, pero no han obtenido respuesta. «Es cierto que ha habido una pandemia por el medio, pero ya hace un año y el Ayuntamiento sólo da largas», lamenta Miguel.

Además de la mejora del alumbrado, desde la entidad vecinal también reclaman más presencia policial. «En la zona del parque, principalmente, ha habido actos vandálicos, robos, y el año pasado un intento de violación, hay partes muy oscuras y apartadas», señala Miguel, que se queja de que «cuando salimos del confinamiento había patrullas de la Guardia Urbana por el parque para controlar que la gente llevara la mascarilla, pero desde hace semanas ya no vuelven a pasar».

Finalmente, el presidente de la asociación de vecinos asegura que esta semana pedirán «por enèsima vez» reunirse con el Ayuntamiento, de lo que dice que «parecía que su intención era cambiar las cosas».