Sucesos
Vecinos de Cala Romana estudian contratar vigilancia privada
El último robo se produjo la tarde del pasado lunes en una vivienda localizada en la calle Terra Ferma
Una parte del vecindario de Cala Romana trabaja en la línea de contratar vigilancia privada para acabar con los robos que se producen en viviendas de la urbanización. El último tuvo lugar la tarde del pasado lunes en la calle Terra Ferma. Los ladrones aprovecharon que los propietarios habían salido de la vivienda para introducirse en el interior.
La alarma saltó a las 19.50, cuando detectó una intrusión inesperada en una vivienda adosada. Los Mossos d'Esquadra informaron ayer martes a esta redacción que alguien habría accedido a la finca después de superar un muro del jardín y entrar por una ventana corredera haciendo fuerza. Los propietarios presentaron denuncia. Los mossos indicaron que los autores de los hechos sustrajeron varios objetos y joyas. Por otra parte, la primera semana de octubre se produjeron dos robos en la calle Rossinyol, en dos viviendas separadas por mucho pocos metros. El vecino que comentó estos hechos a DiariMés apuntó que los robos «están a la orden del día».
«La gente está asustada»
El presidente de la Asociación de Vecinos de Cala Romana, Saül Garreta, manifestó a este medio que «la gente está asustada» ante el número de robos en domicilios particulares que se producen a la urbanización desde hace tiempo. Garreta informó de que hace ocho días la asociación se reunió con representantes del Ayuntamiento, de la Guardia Urbana y de los Mossos d'Esquadra y se acordó «hacer una charla para dar consejos a los vecinos sobre las medidas que adoptar para evitar robos y como actuar en caso de que te entren en casa», dijo Garreta. El presidente de la organización vecinal informó de que, ante la situación de inseguridad existente a la urbanización y el temor de los residentes a ser robados, un grupo de propietarios «quiere contratar seguridad privada». Garreta apuntó que «incluso hemos hecho números». Por el número de personas que secundarían ahora mismo la iniciativa, el coste por vivienda sería de 130 euros mensuales, a partede la alarma.
Garreta se mostró partidario de dejar la seguridad de la urbanización en manos de la administración, «que pienso es quien tiene que dar este servicio». El presidente de la entidad apuntó que en Cala Romana «hay intranquilidad» por la proliferación de robos, pero insistió en decir que la seguridad la tienen que garantizar la Guardia Urbana y los Mossos. «Como presidente de la asociación entiendo que nuestro trabajo no es trabajar para una seguridad privada, pero sí hacer de intermediario entre los vecinos que sí que lo quieren y la administración». Garreta considera que la propuesta en la que trabaja un sector de los residentes «es lícita». El presidente de la organización vecinal añadió que «la vigilancia privada la pagarían unos y se beneficiarían todos».
Por otra parte, Garreta lamentó el hecho de que «no hay presupuesto para este año» para poner lectores de matrículas de vehículos, pero confía en que el Ayuntamiento lo introduzca para los presupuestos municipales del próximo año, como anunció.