Solidaridad
Cinco sintecho pasan la primera noche en el Recinte Firal
Se ha habilitado un servicio de comedor y limpieza personal para facilitar que los usuarios mantengan la distancia de seguridad
El equipamiento municipal que inició la actividad ayer está acondicionado con duchas, lavabos y calefacción. Este recurso asistencial contempla también ofrecerles cenar y desayunar. La elaboración de estas comidas va a cargo de Juventut i Vida de Bonavista.
Cruz Roja vela por las condiciones adecuadas de transporte para no romper la cadena de frío. Las 50 camas con las cuales cuenta respetan los espacios mínimos con el fin de garantizar las normas básicas de seguridad e higiene. La Cruz Roja, cubriendo las funciones de organización humanitaria, es la institución encargada de la atención directa de las personas alojadas en este espacio. Garantizará la aplicación de los protocolos establecidos por este tipo de confinamiento de manera estricta con el fin de evitar contagios. Además del Recinte Firal, el Ayuntamiento de Tarragona también ha puesto a disposición de las personas sin techo 15 camas del Hostal Ram Room, un recurso que se gestionará en coordinación con la Fundación Bona Nit.
Confinamiento domiciliario
La concejala Aguilar-Cunill considera que esta solución se ha previsto para habilitar un espacio a las personas que no tienen hogar atendiendo el toque de queda decretado por la Generalitat y también para estar preparados por si hace falta un confinamiento domiciliario». Días atrás, la concejala Aguilar pidió responsabilidad al resto de ayuntamientos de los alrededores para que encuentren una solución como la de Tarragona y así evitó que otras personas de otras localidades con las mismas carencias lleguen a Tarragona ante la falta de un equipamiento de estas características en su municipio. De hecho, eso ya pasó cuando, durante el confinamiento domiciliario de la primera ola de la pandemia, el consistorio habilitó el pabellón del Serrallo para acoger personas indigentes. Entonces fue el alcalde Pau Ricomà a quien pidió al resto de consistorios de los pueblos y ciudades de los alrededores que tomaran medidas en la misma línea y así evitó que se colapsara el espacio habilidad en Tarragona.