El Ayuntamiento descarta hacer un hotel en la Savinosa y abre la puerta a derribar el preventori

El Ayuntamiento de Tarragona ha cambiado su posicionamiento respecto al futuro del preventorio de la Savinosa y ha descartado hacer un hotel. El consejero de Territorio, Xavier Puig, ha argumentado que la sentencia del Tribunal Supremo que ratifica la anulación del POUM del 2013 «marca un nuevo contexto» y que, con la emergencia climática y la pandemia, hacen que no consideren viable y adecuado el proyecto previsto por la Diputación y que contaba con el apoyo del consistorio. De hecho, el ente provincial ha pedido que se descatalogue el preventorio como Bien Cultural de Interés Local (BCIL), hecho que podría comportar el derribo. El Ayuntamiento también ha pedido que se echen atrás las vallas de protección del recinto para ganar 43.000 m² de espacio público.

El Ayuntamiento ha elaborado un diseño en 3D para visualizar como podría quedar toda la zona de la Savinosa si saliera adelante el proyecto aprobado por la Diputación en los términos que está redactado, con un mucha obra nueva para acoger un hotel y otras equipaciones. Un dibujo que se ha enseñado a la comisión municipal de Territorio que se ha celebrado este viernes y que muestra un importante impacto visual en toda la fachada marítima. Según Puig, esto ha hecho cambiar el planteamiento de varios grupos municipales. Con todo, ha apostado para escuchar ideas que permitan volver a dar vida a la zona y buscar un consenso político y social sobre el futuro del espacio.

A la Savinosa se le abren nuevos horizontes. De entrada, el Ayuntamiento ya ha pedido a la Diputación -titular de los terrenos- que eche atrás la valla que delimita toda el área y la coloque solo para proteger los edificios, que se encuentren en mal estado de conservación. Esto haría que la ciudadanía pudiera disfrutar de 43.000 m² de espacio público. Puig ha indicado que la Diputación los ha transmitido que «estudiará la propuesta».

Paralelamente, el ente ha solicitado al consistorio que descataloguen los edificios del catálogo de BCIL, que también lo estudiará. Un proceso que se puede resolver en unos meses y que tiene que contar con el visto bueno final de la comisión de Patrimonio de la Generalitat. Esto abriría la puerta a derrocar los inmuebles del antiguo preventorio. Una opción que Puig no descarta pero que estará condicionada al proyecto que finalmente se quiera desarrollar. «Estamos abiertos a echar cualquier uso equipamental que pueda disfrutar la ciudadanía, como el educativo, el universitario, el medioambiental o el cultural, pero siempre en la dirección de renaturalizar el espacio», ha subrayado.

La CUP ya ha celebrado la paralización del proyecto y lo ha atribuido «a la movilización de las entidades ecologistas». Las cupaires han remarcado que han sido la única formación que «desde el principio» se han opuesto a la opción planteada desde la Diputación. La CUP quiere que la Diputación «elabore un nuevo proyecto apostando por la transformación « en una equipación púbica, «que responda a las necesidades de la ciudad o del territorio; o bien, que apueste por renaturalizar el lugar recuperando y restaurando el lugar como espacio natural a fin de integrarlo en el Plan de Espacios de Interés Natural (PEIN)».