Las empresas de vaciado de pisos, principales autoras de los vertidos

La gran mayoría de vertidos ilegales que se producen en la vía pública de Tarragona provienen de empresas de vaciado de pisos, subcontratados por inmobiliarias. La Unidad de Medio Ambiente de Guardia Urbana y el equipo de NetejaPública del Ayuntamiento ha detectado un perfil común a raíz de los abandonos de muebles los últimos meses en la ciudad, indicando la autoría mayoritaria a empresas particulares que se han ido identificando poco a poco y, dejando los particulares en un segundo plano, casi sin incidencia. En los casos en los cuales se ha detectado el autor, este ha sido sancionado con una multa de 4.001 euros, ya que suponen una infracción grave contra el medio ambiente. El conseller de Neteja, Jordi Fortuny, aseguraba que se han producido «una media de cinco o seis grandes vertidos mensuales desde noviembre» en la ciudad. Los de enero, antes de acabar el mes, ya han igualado las cifras de las últimas semanas del 2020.

Los dos últimos vertidos de residuos en Tarragona fueron detectados por el consistorio el pasado jueves 14 de enero. Uno tuvo lugar en una isla de contenedores de la calle Real, y el otro al lado de unos depósitos de basura de la calle del Mar. En ambos casos, se trataba de una pila de muebles de todo tipo, como sofás, televisiones, mesas , sillas o armarios, entre otros. Los trastos, abandonados al lado de los contenedores, dificultaban el acceso a los depósitos de basura y ocupaban parte de la acera y de estacionamientos para vehículos.

El Ayuntamiento siguió el rastro de estos dos vertidos, encontrando detrás «una empresa inmobiliaria de Tarragona que había encargado el vaciado de pisos a otra empresa subcontratada», detallaba Jordi Fortuny. La inmobiliaria, que quería dejar a punto dos inmuebles para ser alquilados, reconoció los hechos y, aunque no habían realizado propiamente el vertido –sino que lo había hecho la empresa de vaciado subcontratada–, acababa siendo la última responsable de la infracción. Por este motivo, y siguiendo la normativa de medio ambiente, la inmobiliaria ha sido sancionada con una multa de 4.001 euros y se le ha abierto un expediente. Además, estas acciones «suponen un coste brutal de limpieza», según Fortuny. En el caso del doble vertido del 14 de enero, la retirada de los residuos ascendió a 250 euros, también asumidos por la inmobiliaria.

Práctica habitual

El vertido de residuos es una práctica habitual en la ciudad. «Casi cada semana tenemos que poner alguna multa de 4.000 euros», lamentaba Jordi Fortuny. El conseller de Neteja recordaba otros episodios recientes de magnitud importante, como el caso del vertido de todos los muebles de un piso de Torredembarra cerca del río Francolí, o en la PartAlta, donde a menudo los vecinos se quejan del abandono de muebles en las estrechas calles. Cuando menos, Fortuny indicaba que «no habían notado reincidencia» por parte de los diversos autores.

El número de particulares que dejan muebles y electrodomésticos en desuso en la vía pública sería muy menor y en cantidades menos voluminosas. Aun así, el presidente de la Associació de Veïns de la Granja, Francisco Rosillo, defendía que en los barrios de Ponent esta práctica era mucho más habitual: «El centro de reciclaje móvil sólo pasa los lunes y a mucha gente le es imposible llevar grandes muebles al centro de reciclaje».