Paleoecología
Un diente de leche de Vera, la neandertal de hace 45.000 años, que se estudia desde Tarragona
El resto se encontró en la cueva de Prado Vargas, en la provincia de Burgos
Un diente de leche ha ayudado a fechar neandertales de 45.000 años atrás en la cueva de Prado Vargas (Cornejo, Merindad de Sotoscueva, Burgos), según informa el Instituto Català de Paleoecologia Humana y Evolución Social (IPHES).
El diente forma parte de un completo estudio que ha publicado la revista 'Quaternary Science Reviews' sobre las estrategias de subsistencia de los grupos de neardentals que ocuparon esta cavidad, que se estudia desde el año 2016.
La investigadora del IPHES y profesora asociada de la Universidad Rovira i Virgili de Tarragona (URV) Marina Lozano ha analizado el diente de leche de una niña pequeña, en la cual han decidido llamar Vera, que se le cayó cuando tenía 8 años de edad.
Además del diente de leche de Vera, también se ha hecho un completo estudio de los fósiles de animales, los restos de polen, las herramientas y sus huellas de uso, la formación del depósito y la cronología del nivel 4 de la excavación.
El equipo lo dirigen la profesora Titular de Prehistòria de la Universitat de Burgos (UBU) Marta Navazo; el investigador del Museo de la Evolución Humana (MEH) Rodrigo Alonso y el del Centro Nacional en Evolución Humana Alfonso Benito.
Además del IPHES-BÚSQUEDA-URV, han colaborado otros científicos de la Universidad del País Vasco-IKERBASQUE, de la Universidad Politécnica de Madrid y de la Universidad de Adelaide (Australia).
Esta diversidad ha permitido integrar metodologías tradicionales clásicas de identificación y análisis de los millares de restos arqueológicos y paleontológicos con técnicas punteras de análisis espacial y de materiales de los laboratorios.
En la revista también se presentan los resultados de un sondeo estratigráfico que revela que, bajo el nivel 4, hay más de 6 metros de sedimento con otros niveles arqueológicos del mismo periodo.
Eso implica que un grupo de neandertales vivió de manera ininterrumpida en zona legándose de unas generaciones en otras una tradición cultural propia que estos investigadores están descubriendo.
Las excavaciones en Cova Prado Vargas han sido financiadas por la Consejería de Cultura de la Junta de Castilla y León y ha contado con la colaboración del Ayuntamiento de la Merindad de Sotoscueva y una ayuda para analíticas de la Fundación Palarq.