Sociedad
Ferran Gerhard da todo su legado literario y musical en Tarragona
El legado que ha dado al Ayuntamiento consta de casi diez mil libros y más de dos mil discos
Esta mañana el alcalde de Tarragona, Pau Ricomà, ha recibido al padre de Ferran Gerhard (Valles, 1953-Tarragona, 2020) quien quiso dar en su momento, y hoy se ha hecho realidad, todo su legado literario y musical. El alcalde se ha mostrado mucho agradecido por esta importante donación y ha intercambiado una visita institucional con el padre, que también se llama Ferran Gerhard. El legado que ha dado al Ayuntamiento consta de casi diez mil libros y más de dos mil discos. Literatura y música que Gerhard ha querido dar para las bibliotecas públicas de la ciudad. Esta es una colección en sintonía con su personalidad: muy variada con respecto a la temática, con carácter local y universal, con títulos clásicos y contemporáneos, con libros raros y heterodoxos, con muchas ediciones agotadas fruto de la herencia familiar pero, principalmente, por la compra ininterrumpida y selectiva durante cuarenta años. Era uno asiduo en el mercadillo de los domingos que se celebraba en la Parte Alta y donde asistía y compraba de todo. También lo hacía en las presentaciones de libros y discos que se hacían en la ciudad y siempre estaba pendiente de ayudar a los jóvenes creadores.
Ferran Gerhard Oliva (Valls, 1953-Tarragona, 2020), vivió desde muy joven en la ciudad de Tarragona, de niño en las Cases Barates y, ya emancipado, en la casa familiar de la calle Méndez Núñez. Descendiente de una familia de comerciantes suizos que se instaló en Valls a principios del siglo XIX, y de la cual fueron miembros el conocido músico Robert Gerhard Ottenwälder y el político Carles Gerhard Ottenwälder. Licenciado en Ciencias de la Información por la Universidad Autónoma de Barcelona, trabajó en varios medios de prensa, radio y televisión. Estuvo afiliado al sindicato CNT y al Sindicato de Periodistas de Cataluña.
En los años setenta y ochenta, fue redactor en el semanario Mistral y en la emisora COPE, entre otros. Desde 1983 en el 2009 ejerció como corresponsal de El Periódico de Cataluña. Desde entonces se dedicó a escribir. En la primera etapa, como escritor, fue autor de los poemarios Electrofenia (1983) y Blade Runner Blues (2010) y los libros de narrativa La Patacada de King Kong (2005) y KS77 (2007), también coordinó un libro catálogo en homenaje al grafista Guigui (2009). En la segunda etapa, hasta su muerte, publicó todos sus libros con Silva Editorial: la novela Gatos rumberos (2012); los cuatro bitacorismes Ladridos de plata (2014), Ralámpagos de hojalata (2015), Tarraguiguismos (2016) y Cicutagrafías (2017); la novela El pozo sin hondo de la noche (2018); la crónica La semilla del silencio (2019); el poemario Water Closet Project (2019) y la novela El aullido del olvido (2020). El año 2017 coordinó el libro de relatos Burdelatura, conjuntamente con un grupo de escritores y escritoras de Tarragona. Sus narraciones breves también se reúnen en obras colectivas como: La ciudad por las calles (2002) y Un bar de cuentos (2012).
Se autodefinía como un hombre «feo, ácrata y sentimental». Sus colegas periodistas lo calificaron como un profesional «íntegro, irreductible, independiente y generoso».