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El PSC reclama una Junta de Seguridad Local extraordinaria en Tarragona

Begoña Floria lamentó que el proyecto de las comisarías de seguridad esté paralizado

La concejala de Cultura, Begoña Floria, forma parte de la Comisión del Nomenclátor.

La concejala de Cultura, Begoña FloriaMauri Fernández

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«Estamos en un momento de muchísima preocupación por el incremento de la sensación de inseguridad que hay en la ciudad», sosteníala concejala socialista Begoña Floria, por lo que el grupo municipal ha pedido que se celebre una Junta Local de Seguridad extraordinaria. Puso de ejemplo los diferentes robos y actos vandálicos, como en la Llar de Jubilats de Bonavista, enla capilla de la Floresta o enlas diferentes urbanizaciones de la ciudad. «Necesitamos que el gobierno actúe inmediatamente», decía la socialista.

En este sentido, Floria lamentaba que fue en octubre de 2019 cuando el gobierno de ERC y ECP «anunció la instalación de las cámaras de seguridad en Cala Romana y también que empezaban con el proyecto de las comisarías de proximidad» y añadió que, «ya sabemos que este gobierno se dedica a hacer de oposición y a mirar todo el rato por el retrovisor y decir que el PSC es el culpable de todo, y en este caso el tiempo sitúa las cosas en su sitio y podemos empezar a decir que los compromisos de mejora de la estructura de seguridad y de recuperar una apuesta fuerte como es la policía de proximidad no se han visto». Los medios recordaron a Floria que lo que sí que ha presupuestado y en lo que se ha empezado a trabajar en la zona de Llevantson los lectores de matrículas, que el concejal de Seguridad, Manel Castaño, anunció a DiariMés que se instalarían antes de que acabara este 2021. Al respecto, dijo que, «si es así, nos alegraremos muchísimo, pero también prometieron las cámaras de seguridad y no lo han cumplido». En este sentido, Floria señaló que «no dudamos de la buena voluntad de Castaño, sino que dudamos de la capacidad de gestión de este gobierno y que en estos momentos estén atendiendo la sensación de inseguridad de los vecinos», de la cual apuntó que no siempre se corresponde con los datos de delitos reales «porque no todo el mundo acaba denunciando».

El PSC advirtió también que en los próximos cuatro años una parte de la plantilla de la Guardia Urbana empezará a jubilarse y, por lo tanto, piden que se inicien los trámites para convocar nuevas plazas enla policía local. «Ha habido un cambio en la ley que permite adelantar la jubilación y como mínimo, por los cálculos que ya teníamos, unos 40 agentes se jubilarán en los próximos tres años, y nos preocupa que en estos dos años no se haya activado todavía ningún tipo de plan para resolver esta situación, ya que no puedes incorporar agentes de golpe, tiene un proceso», defendía Floria, que añadía que «ahora sólo se están haciendo las pruebas de aquello que ya dejamos previsto los socialistas, que incrementamos la plantilla con 100 efectivos». La concejala lamentó también, a nivel interno de la Guardia Urbana, que no hay mandos intermedios. «No hay inspectores, de subinspectores sólo dos en activo, no hay intendentes, sólo el intendente mayor, por lo tanto es urgente también resolver la situación de esta falta de mandos», comentaba el edil socialista, destacando que el cuerpo tendría que estar mejor dotado coincidiendo con las situaciones de inseguridad.

Finalmente, Floria lamentaba que a los agentes de la Guardia Urbana sólo se les da una mascarilla FFP2 cada semana. «Son agentes que hacen tareas de riesgo, ya que se exponen al contagio, y eso incumple las medidas de prevención de riesgos. Como mínimo se tendría que dar una mascarilla en función de las horas y los días que están prestando este servicio», sosteníala concejala.

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