Sociedad
Vecinos de Sant Pere i Sant Pau critican que la OMAC lleve un año cerrada
Desde el Ayuntamiento recuerdan que la gestión de las oficinas se reorganizó por la covid-19
No han sido pocos los vecinos que han trasladado a la Asociación de Vecinos de Sant Pere i Sant Pau su malestar por el hecho de que la Oficina de Atención al Ciudadano (OMAC) del barrio siga cerrada después de casi un año. El presidente del AVV, Lluís Trinitat, considera que «no es normal» y pide que se reabra para que las personas mayores, principalmente, puedan realizar sus trámites de la manera más fácil posible, sin tener que desplazarse hasta el centro de Tarragona ni tener que hacerlo por Internet y telefónicamente, ya que «les es muy complicado».
De hecho, Trinitat presentó una queja a la misma OMAC y la respuesta fue que «el cierre ha sido motivado por la reorganización de la gestión de las oficinas ante la situación excepcional de la pandemia de la covid-19». Concretamente, el consistorio cerró las oficinas de Sant Pere i Sant Pau, Sant Salvador y la plaza de la Font, y mantuvo abiertas las de la Rambla Nova y la de Torreforta, ya que son las situadas en puntos de mayor población. De esta manera, se reagrupó la plantilla en estas dos, creando dos bloques que van compaginandopara no coincidir y, en caso de contagio, que se pueda garantizar el funcionamiento de las dos oficinas. Además, también se reforzó la atención telefónica y telemática.
En este sentido, Trinitat considera que esta reorganización se habría podido hacer de otra manera, como por ejemplo «abriendo cada mes una de las oficinas en los barrios para permitir que toda la ciudadanía pueda hacer los trámites y las gestiones con facilidad». En Sant Pere y Sant Pau hay 20.000 habitantes y «creemos que no se justo que la OMAC lleve un año cerrada», reitera Trinitat, que explica que, principalmente las personas mayores, «no pueden ir hasta Tarragona o no quieren porque los buses van llenos de usuarios y tienen miedo a contagiarse. Además, no dominan Internet y no pueden hacer las gestiones telemáticamente y por teléfono también les cuesta mucho». El presidente de la entidad vecinal se muestra esperanzado con el hecho de que «el gobierno se replantee esta cuestión y busque una manera para poder reabrir la oficina». Si no fuera así, dice que hablarán con los grupos municipales y presentarán, a través de los que lo quieran, una moción para el próximo plenario, «a ver si así el gobierno y la oposición llegan a un acuerdo para solucionarlo». Si eso tampoco fuera suficiente, Trinitat asegura que ya se plantearían tomar otras medidas, pero confía en que con la comprensión de los políticos se podrá llegar a un acuerdo.