Vecinal
Varias asociaciones vecinales de Tarragona avisan sobre una situación económica límite
La Federació Segle XXI pide que el Ayuntamiento avance inmediatamente parte de la subvención anual
Varias asociaciones de vecinos de Tarragona alertan sobre una situación económica límite. Por este motivo, las entidades piden al Ayuntamiento que se les adelante de forma inmediata la primera línea de la subvención anual, de un máximo de 1.300 euros, con el fin de poder hacer frente a los pagos del alquiler de sus locales o los gastos de suministro de luz, agua o teléfono. Además, algunas asociaciones que forman parte de la federación vecinal Segle XXI denuncian que el conseller de Cooperació, Hermán Pinedo, no ha respondido sus reclamos durante las últimas semanas, en las cuales los problemas económicos han ido a más, poniéndolas en grave peligro. Cuando menos, el próximo jueves está convocada la comisión de evaluación entre el conseller y representantes de las federaciones.
La convocatoria a fin de que las asociaciones de vecinos de la ciudad pudieran pedir la subvención anual se cerró el pasado 15 de marzo. De forma habitual, la ayuda económica de un máximo de 14.000 euros se suele otorgar de forma íntegra durante mayo o junio, pero varias entidades vecinales piden que se les adelante la primera línea, de 1.300, lo antes posible. Esta corresponde al mantenimiento del local, mientras que la segunda, más generosa, se destina a las actividades.
«Hay asociaciones sin dinero y que no pueden pagar ni la luz», lamentaba Jacinto Moreno. El presidente de la Federació d'Associacions de Veïns Segle XXI detallaba que las entidades de «Nova Verge del Carme, el Barri del Port, Sant Pere i Sant Pau, Icomar y el Miracle se encuentran con problemas económicos graves». De hecho, el local vecinal de Nova Verge del Carme tiene los suministros cortados a causa de los impagos. Por otra parte, los vecinos del Port no recibieron la subvención el año pasado a causa de problemas burocráticos, mientras que el resto no pudo justificar la subvención porque no se celebraron fiestas. Ante esta situación, y para intentar parar el golpe, desde la FAV Segle XXI intentarán adelantar dinero a algunas de las asociaciones que agrupa. Por su parte, el presidente de la Federació d'Associacions de Veïnsde Tarragona (FAVT), Alfonso López, corroboraba la delicadeza del momento: «Si pasa mayo, empezaremos a tener problemas».
«Pedimos que se adelante la primera línea para poder pagar lo más básico. Llevamos un par de años muy malos, el Ayuntamiento no puede dejar morir a las asociaciones de vecinos», relataba Moreno. El presidente de la federación Segle XXI añadía que las entidades «sufren por su supervivencia, son personas altruistas que trabajan gratuitamente por la ciudad».
Sant Pere i Sant Pau
La Asociación de Vecinos de Sant Pere i Sant Pau vive una situación comprometida a causa de una deuda con el Ayuntamiento de 1.500 euros, que ha asumido de forma fraccionada y como medida temporal su presidente, Lluís Trinitat, mientras no reciban la subvención de este 2021. El problema se remonta, según Trinitat, al año pasado: «Nos impusieron una auditoría y nos avisaron con dos días de margen y, como nosotros no lo podíamos asumir, lo encargamos a un gestor. Este no justificó bien la subvención del 2019, porque por error no se reflejaba que se había utilizado toda, y nos dijeron que teníamos que pagar más de 1.500 euros». Ahora, el presidente de la entidad vecinal de Sant Pere i Sant Pau explica que «nos están obligando a acabar diciembre a cero, pero no recibimos el dinero de la subvención en junio, y eso es un problema porque seguimos teniendo gastos corrientes». «Estamos en números rojos», confesaba Trinitat, que recalcaba que poder hablar con Pinedo ha sido «imposible» hasta ahora.