Los Idus de marzo protagonizarán la XXIII edición de una Tarraco Viva del 22 al 30 de mayo

Los Idus de marzo, la muerte de Juli Cèsar y el fin de la República romana serán los grandes ejes sobre los cuales girará la XXIII edición de Tarraco Viva. El festival de recreación histórica centrado en el mundo romano de Tarragona se celebrará del 22 al 30 de mayo.

De la misma manera que en la última edición, combinará el formato presencial y en línea, si bien en esta ocasión y a causa de la mejora de la situación sanitaria el 65% de los 220 actos previstos se podrán hacer con el público in situ. Eso hará que haya más entradas disponibles para ver los espectáculos de recreación histórica, charlas o monólogos y también se han previsto actividades en nuevos espacios patrimoniales de la ciudad.

El director deTarracoViva, MagíSeritjol, ha expuesto que la idea del festival es «conocer el pasado para comprender el presente». «El patrimonio histórico es una ventana a través de la cual se ven otras realidades, que nos pueden permitir entender y visualizar mejor qué nos está pasando ahora para mejorar», ha manifestado. En este sentido ha comentado que se ha escogido la muerte de Julio César como tema de esta edición «como símbolo» de lo que quieren tratar: las desigualdades sociales y la justicia social. «No es tanto el asesinato, sino el trasfondo. Es el magnicidio más famoso de la historia, que dejó una huella enorme en literatura, teatro o cine», ha constatado.

El espectáculo inaugural será el 22 de mayo y consistirá en un debate sobre el final de la República romana, y abordará cuestiones como el populismo, el autoritarismo, las luchas populares o las noticias falsas. Para la clausura se simulará un juicio sobre los motivos por los cuales se mató a Julio César. En el espectáculo participarán los espectadores, tanto los presenciales como los que lo sigan a través de internet, y serán ellos los que acabarán emitiendo el veredicto. Este acto se hará en el Teatro Auditorio del Camp de Mart, el espacio que tendrá más aforo –hasta 300 plazas- y que también acogerá las luchas de gladiadores y un espectáculo de títeres ideado para la ocasión.

Aparte, el consejero de Patrimonio de Tarragona,HermánPinedo, ha destacado que la pandemia ha permitido descubrir nuevos espacios para el festival por el hecho de tenerse que adaptar a las restricciones sanitarias. Si en la última edición se hicieron actos en la terraza del anfiteatro, en el pretorio o en el circo, en esta ocasión por primera vez se han previsto espectáculos en las escaleras romanas de la torre de los Advocats y en las nuevas gradas del circo de la plaza de los Sedassos. Aparte, los organizadores han tenido la voluntad de «descentralizar» el festival. Tanto a nivel de la ciudad, con actividades en los barrios, como territorial, con el mantenimiento de acciones en municipios próximos que también tienen patrimonio romano como Altafulla, Cambrils o Constantí.

Más localidades

El presupuesto de esta edición será de 270.000 euros, asumido en su mayoría por el Ayuntamiento de Tarragona. La Diputació de Tarragona y la Generalitat también colaboran, ya sea con aportaciones económicas, cediendo espacios o produciendo espectáculos. De cara a los espectadores, buena parte de las actividades tendrán un precio de dos o tres euros. Las entradas se pondrán a la venta los próximos días y globalmente habrá unas 10.000 disponibles, muy por encima de la última edición del pasado octubre, cuando se ofrecieron unas 4.000.

Entre las novedades,Seritjolha destacado la presentación de un documental titulado Cèsar: cas obert, producido desde el certamen y que aborda la muerte de Julio César. La producción consta de diferentes capítulos breves y se podrá ver en la web del festival. La vertiente telemática del festival también se ha mantenido, dada la situación pandémica. Aún así,Seritjolha considerado que es un formato a tener en cuenta de cara al futuro, para acercarse a nuevos públicos. En este sentido ha valorado muy positivamente la implantación que ha tenido en las escuelas.