Unas 200 personas reclaman una mejor atención en el CAP Bonavista

Unas 200 personas se se han concentrado este jueves delante de el Centro de Atención Primaria de Bonavista para reclamar una mejor y más amplia atención médica. Vecinos del barrio denuncian que el centro no cumple con un mínimo de criterios sanitarios y se sienten desamparados. Entre sus reclamaciones destacan la ampliación a un servicio de 24 horas y la vuelta y agilización de las visitas presenciales. Aparte de la concentración organizada por la Asociación de Vecinos de Bonavista, la entidad también ha recogido durante el año que llevan de protestas más de 1.500 firmas para pedir a la administración pública catalana que se ponga manos a la obra.

«El principal problema actualmente es que cuando pedimos una cita en el CAP, nos la dan al cabo de un mes y medio y, además, el médico la hace telefónica y no presencialmente», detallaba indignada Loli Gutiérrez. La presidenta de la Asociación de Vecinos de Bonavista también denunciaba que en el centro del barrio también se derivan pacientes de la Canonja, por loque a menudo las ocho líneas telefónicas delCAPse colapsan.

«Exigimos que nos visiten presencialmente, ya que el médico no puede valorar por teléfono según qué patologías que merecerían una exploración,» concretaba Gutiérrez, que añadía que este último año «ha habido personas que han muerto no por covid, sino por cáncer, y sabemos lo que ha pasado». Además, la presidenta vecinal indicaba que existe un agravio comparativo con el CAP de Sant Pere i Sant Pau: «Allí se programan visitas para al cabode un día o dos, y además son presenciales. Por qué el nuestro funciona así»?.

Por otra parte, Gutiérrez reclamaba «unas urgencias de 24 horas para un barrio donde viven casi 10.000 personas y teniendo en cuenta que se tienen que sumar las 5.500 de la Canonja». En este sentido, los vecinos se tienen que desplazar al CAPde la Granja o al hospital Joan XXIII si necesitan atención fuera de las horas de servicio de su centro de referencia. La incompatibilidad derivada con tener que compaginar la atención con la Canonja hace que el pediatra a menudo no esté en Bonavista, hecho que lamentaba Gutiérrez: «No puede ser que los niños de Bonavista no se puedan visitar aquí».

Los problemas también afectan a las recetas electrónicas, que a menudo no se pueden renovar porque los plazos establecidos caducan por la lentitud del CAP. Con todo, los vecinos están al acecho a raíz del cambio de gobierno en Catalunya con el fin de hablar con la nueva dirección sanitaria regional y desencallar la situación.