Cultura
Tarraco Viva cierra la edición del 2021 con un 85% de entradas vendidas
El festival romano ha combinado la presencialidad en espacios patrimoniales o el Camp de Mart con la apuesta por el contenido virtual
Tarraco Viva cerró ayer la edición de este 2021 con aproximadamente un 85% de las 10.000 entradas vendidas. El festival de divulgación histórica romana ha combinado los actos presenciales en espacios patrimoniales de la ciudad o de otros como el Camp de Mart con la apuesta por actividades virtuales, con mucha fuerza para el contenido audiovisual. Los actos publicados han conseguido más de 10.000 visualizaciones a través del canal en línea de la página web, que ha recibido unas 140.000 visitas las dos últimas semanas. Se trata de la segunda edición consecutiva que apuesta por este formado híbrido. El año pasado, Tarraco Viva se celebró fuera de las fechas habituales, en otoño, teniendo que rehacer todo el programa de nuevo a causa de la pandemia, por lo que este año se ha recuperado una cierta normalidad.
«Estamos muy contentos. Con el año y pico que hemos pasado, con problemas de todo tipo, hemos mostrado un fondo de resiliencia. No podemos pedir más», explicaba Magí Seritjol. El director del Tarraco Viva calificaba las cifras alcanzadas como «un gran dato», pero ponía énfasis en el hecho que «el éxito realmente es las ganas de la gente a participar en la cultura, en espacios de encuentro y las expectativas de reencontrarse». Han sido diez días muy intensos para la organización, que cuenta con casi un millar de personas implicadas. «Tenemos un gran cansancio, pero siempre vale la pena hacer las cosas, defenderlas y organizarlas», confesaba Seritjol, que añadía que el festival Tarraco Viva significa «un esfuerzo de ciudad y de territorio, ya que la historia es nuestra pasión».
El Camp de Mart se ha hecho sitioentre lugares tan icónicos como el Anfiteatro, el Circo, el Foro, las Murallas o el Pretorio, entre otros. El teatro auditorio al aire libre ha sido «un pulmón para ensanchar los escenarios» en tiempo de pandemia, según Seritjol. «A menudo hemos tenido lleno dentro de los aforos restringidos», decía el director del Tarraco Viva, que recordaba que «a medio festival pasamos del 50% al 70% de la capacidad, cosa que está muy bien, es un paso positivo para recuperar cierta normalidad». De cara al próximo año, Seritjol afirmaba que «tenemos las herramientas para recuperar la normalidad».
Como el año pasado, el festival de este año también ha potenciado la virtualidad. «La vida de vez en cuando te hace pasar por una sacudida, por cosas que no puedes planear. El 2019 había sido fantástico y, de sopetón, llegó la pandemia. Eso nos enseñó a tener paciencia, resiliencia y a ser más humildes», explicaba Seritjol, en referencia al modelo del año pasado, que ha servido de referencia para este año. El formato digital, que ha sido muy exitoso este 2021, «ha llegado para quedarse, ya que forma parte de la vida de la gente y es la manera de comunicarse en el siglo XXI y nos tenemos que adaptar». Cuando menos, Seritjol destacaba la necesidad de mantener la presencialidad, ya que sin ella «la cultura pierde valor».
Repercusión en la ciudad
Además del éxito del festival en sí mismo, Tarraco Viva siempre espolea el turismo y el ocio en la ciudad. Si bien la situación todavía no ha sido igual que antes de la pandemia, este año hoteles y restaurantes tarraconenses han notado cómo el festival los ha dado una mano, acompañada del reciente relajamiento de medidas. Javier Escribano, presidente de la Asociación de Hostelers de Tarragona Ciudad, señalaba que «los últimos fines de semana se ha visto un incremento de clientes a las noches y, a buen seguro, está gracias en parte en Tarraco Viva». Por su parte, el presidente de la Asociación de Hoteles de Tarragona indicaba que los visitantes han estado esencialmente catalanes y pedía que la apuesta por el festival fuera «todavía mayor».