Emergencias
Los Bomberos hicieron un total de 300 salvamentos en Tarragona en el 2020
La mayoría de estos rescates son de personas mayores que se han caído en casa o personas atrapadas en hundimientos, entre otros
Los Bomberos de la Generalitat de Catalunya hicieron casi un salvamento al día por término medio durante todo en el 2020 en la ciudad de Tarragona. En total hicieron 300, la mayoría de los cuales consistieron en rescates de personas de edad avanzada que habían caído a su domicilio. «En estos casos, los ancianos disponen casi siempre de un sistema de alarma que avisa en la empresa de este servicio, la cual después nos avisa a nosotros,» explica Lluís Domingo, jefe del Parque de Bomberos de Tarragona, que añade que «eso pone de manifiesto la gran cantidad de personas mayores que vive sola, nosotros lo intentamos muy claro». Aparte, también entran dentro de estos servicios los rescates de personas atrapadas en un ascensor o en un hundimiento, los salvamentos acuáticos en las playas cuando no hay servicio de socorrismo y evitar que una comida que ha quedado al fuego acabe provocando un incendio en la vivienda. Con respecto al 2021, hasta el mes de mayo han realizado 111 servicios de este tipo.
Después de los salvamentos, el motivo por el cual los Bomberos hicieron más salidas durante el 2020 fueron los incendios urbanos, un total de 292. Del mes de enero en el mes de mayo de este año, es decir en 151 días, han apagado 146 fuegos en la ciudad y en este caso, explica Domingo, el más común es la crema de contenedores. «También hacemos muchas salidas por incendios de vehículos, normalmente fortuitos, y también acostumbramos a tener incendios de viviendas, aunque la percepción general de la ciudadanía es que no es así,» señala el sargento, que también hace guardias como subjefe de la Región de Emergencias de Tarragona. Al respecto, Domingo comenta que «a menudo tienen que ver con familias o personas que se encuentran en situaciones económicas complicadas, hecho que puede acabar determinando que las instalaciones eléctricas sean menos buenas y haya menos sistemas de prevención.» En esta línea, explica que los incendios en viviendas también se producen en pisos ocupados ilegalmente que tienen la luz pinchada. «Aunque no acabe en incendio, ya nos genera un riesgo porque tenemos que intentar garantizar el corte de suministro y hacerlo cuando la instalación está modificada es muy peligroso, porque no se tienen en cuenta los sistemas de seguridad,» lamenta el bombero que, a pesar de todo, asegura que también se queman casas de alto estànding, ya que en la mayoría de casos estos incendios son provocados para comer que se ha quedado al fuego cocinándose.
Los Bomberos también realizaron durante el 2020 hasta 157 servicios por accidentes de tráfico –66 hasta el mes de mayo de 2021–, 129 por incendio de vegetación –53 este año–, 45 por escapes peligrosos, de gas por ejemplo, –19 este 2021– y 371 por asistencia técnica, como pueden ser desconexiones de alarmas, gestiones de colmenas de abejas y tareas de retirada de agua en episodios de inundaciones –109 este año. Aparte de estas operativas más urgentes, los Bomberos también llevaron a cabo en Tarragona durante el año pasado 42 salidas por actividad no urgente, que son revisiones de espacios concretos u operaciones de prevención ya programadas; siete dispositivos preventivos, como cuándo envían un furgón durante el Concurso de Fuegos Artificiales, por ejemplo; 207 salidas para hacer prácticas, dos simulacros y siete servicios de soporte técnico. En total, 1.559 servicios en la ciudad de Tarragona durante el 2020, con respecto a las 1.635 que hicieron en el 2019 y las 675 que ya han hecho entre enero y en mayo de 2021.
Como pasó en general, la pandemia de la covid-19 también modificó el trabajo del día a día de los Bomberos. En este sentido, Domingo explicaba que «al principio de todo, con el confinamiento, nos cambió completamente la lógica del servicio, ya que prácticamente desaparecieron los accidentes de tráfico y los laborales», y añade que durante aquella época «nos centramos en aportar nuestra ayuda a nivel de desinfecciones de residencias y geriátricos, o haciendo actuaciones de movilización de pacientes y sectorizarlos a nivel de riesgo por lo que hacía en los positivos en los mismos centros». El jefe del Parque de Bomberos de Tarragona recuerda que «nos tocó adaptarnos, cuando nosotros estábamos más acostumbrados a operar en situaciones de riesgos químicos y no biológicos, aunque ya habíamos trabajado con el Ébola». Así, explica que el cuerpo se preparó rápidamente por el escenario de aquel momento y crearon «dispositivos amplios y potentes con mucho personal».
Con todo, Domingo reconoce que ya notan un retorno progresivo hacia la normalidad, sobre todo con la campaña de vacunación. En este sentido, asegura que poco a poco volverán en el escenario prepandemia, donde habrá más movilidad y por lo tanto más accidentes de tráfico, sobre todo de madrugada en las vueltas de las discotecas, unos servicios que sin el ocio nocturno han desaparecido casi del todo. También esperan que haya más incendios de vegetación. Según Domingo, los datos generales de 2020 indican que fue un año con muy pocos casos de este tipo, «pero la expectativa de este año es que tendremos más, ya que el otoño y el invierno han sido secos y la previsión es que esta sequía se mantenga el resto del año». «Lo que hemos ido haciendo es ser capaces de dar respuesta a todos los riesgos posibles y la pandemia lo ha puesto de relieve», señala Domingo, que por otra parte pone también el ejemplo del salvamento acuático en las playas cuándo no es temporada de verano y, por lo tanto no hay socorrismo. «La gente piensa que sólo apagamos fuegos, pero hacemos de todo», dice.
Otro motivo por el cual los Bomberos de Tarragona dan respuesta a un abanico de riesgos muy completo son las características del territorio, que en este caso engloba un espacio un poco más extenso que la comarca del Tarragonès. «Tarragona es una ciudad muy diversa, ya que además de la trama urbana también hay una extensa zona boscosa, urbanizaciones muy alejadas, como la Mora, y una industria muy potente, además del mar y las playas,» sostiene a Domingo, que señala que «el Parque de Bomberos de Tarragona es lo único de Cataluña que tiene todos los vehículos posibles, uno para cada tipo de servicio: bombas urbanas pesadas, ligeras, autoescaleras, furgón de accidentes, camión NRBQ, es decir, para riesgos nucleares, radiológicos, biológicos y químicos, etc.