Hostelería
Prohíben la música en las terrazas de la calle Lleida y Governador González de Tarragona
A raíz de las quejas vecinales, el Ayuntamiento ha comprobado que las actuaciones en los bares incumplían las normas de ruido, de horarios y de aglomeraciones
El Ayuntamiento de Tarragona ha retirado el permiso para llevar a cabo actuaciones musicales en bares de la calle Lleida y de la calle Governador González, en torno a la plaza Corsini, por el incumplimiento de las condiciones establecidas en el decreto que permitía estas actividades en las terrazas temporales para dinamizar el sector de la hostelería durante la pandemia de la covid-19. Se trata de una normativa que dejaba muy claras las reglas del juego con respecto a los horarios, a los límites de ruido y la ocupación de la vía pública, evitando siempre las aglomeraciones de personas, para evitar el contagio. Unas medidas que no han sido respetadas por los establecimientos que ahora, en caso de incumplir la prohibición, perderán también el permiso temporal para colocar las mesas y sillas en la calle.
Con el objetivo de dar un impulso económico a los bares y restaurantes de la ciudad de Tarragona que habían sufrido las restricciones de la covid-19, el área de Dominio Público permitió el año pasado la colocación de terrazas temporales en la vía pública a aquellos establecimientos que no tenían la licencia. Además, para dinamizar el sector y hacerlo más atractivo, se dio la posibilidad a los negocios de poner música o contratar actuaciones musicales. Ahora bien, con una serie de condiciones. En primer lugar, se podía hacer «en aquellos lugares que comparten terrazas y los permite disponer de un espacio común para su disfrute y, a la vez, llevar a cabo la actuación cumpliendo con la normativa de seguridad de prevención del riesgo de contagio de la covid-19 vigente en cada momento». En este sentido, el decreto establece también que «la ocupación no podrá entorpecer el libre uso de elementos urbanos ni los itinerarios habituales y accesibles de los peatones».
Con respecto a la música en sí, la normativa dice que pueden ser actuaciones musicales ambientales o de pequeño formato, es decir, que, si se pone música con un altavoz, este tiene que ser de baja intensidad y potencia y, por otra parte, si se trata de una actuación en directo, tiene que ser con instrumentos acústicos sin altavoces ni amplificadores. Con relación a los horarios, sólo se permite de 12 a 14 horas y de 19 a 21, y se tiene que pedir permiso al Ayuntamiento con tres días de antelación para que este pueda informar a la Guardia Urbana para su conocimiento. Finalmente, la normativa insiste en que «en ningún caso las actuaciones musicales supondrán un incremento de aforo en las terrazas directamente afectadas ni la creación de puntos de aglomeración de personas», y los propietarios del establecimiento son los responsables que eso no pase.
Según el decreto, tanto la Guardia Urbana como el mismo Ayuntamiento han recibido una serie de quejas por diferentes incumplimientos de estas normas por parte de los establecimientos de la calle Lleida y de la calle Governador González, tanto por las dificultades de los vecinos para circular por la acera y entrar en su casa a causa de las aglomeraciones de personas, que también aumentan el riesgo de contagio de la covid-19, como para no cumplir tampoco los límites de horario y ruido establecidos.
Con todo, el decreto resuelve prohibir la música de fondo y las actuaciones en las terrazas de los bares de las dos calles en cuestión y advertir a los propietarios que incumplirla supondrá la retirada del permiso de terraza temporal.