Denuncian el envenenamiento de gatos ferales en una colonia del barrio Sant Pere y Sant Pau de Taragona

Después de vivir algunos destrozos, una de las colonias controladas de gatos ferales de la calle Miquel Servet de Sant Pere i Sant Pau ha sido víctima de un envenenamiento, según denuncia la asociación RodoGatSPerePau, que gestiona el espacio con el Ayuntamiento de Tarragona. Su presidenta, Glória Herrera, explica a DiariMés que ya han encontrado dos cadáveres de felinos que, después de ser analizados por un veterinario, han llegado a la conclusión que han ingerido algún tipo de veneno de cazador, sin haber podido determinarlo. Por otra parte, lamenta también que han desaparecido un gran número de gatos que, de la misma manera, habrían muerto, aunque dice que será complicado encontrar los cuerpos porque la colonia se encuentra al lado de un barranco de difícil acceso.

Según Herrera, el motivo por el cual alguien ha tirado veneno en la zona es que hay ratas, pero la animalista defensa que «son ratas de campo que, además, se acercan a la zona urbana por la cantidad de basura que mucha gente deja en la calle». Además, asegura que, si lo que esta persona quería era que las ratas desaparecieran, «lo que ha hecho es contraproducente –explica Herrera- porque los gatos las matan y, en todo caso, se marchan cuando los huelen.

El animalista asegura que ya han trasladado los hechos al Ayuntamiento de Tarragona y dice que la Guardia Urbana los investigará e intentará averiguar quién ha estado el autor, aunque reconoce ser consciente de que será complicado encontrarlo. «Además de tratarse de maltrato animal, también es un delito contra la salud pública, ya que si algún niño lo toca y después se pone la mano en la boca, por ejemplo, se podría intoxicar», alerta a Herrera.

Con todo, la presidenta de la asociación lamenta que «hace meses que destrozan el trabajo de mucha gente para controlar estas colonias de gatos». Y es que el envenenamiento de estos últimos días no es el primer ataque que sufren, sino que desde enero, según Herrera, «hemos detectado varios actos de vandalismo, como ahora otros gatos muertos después de haber sido golpeados o la colonia destrozada e, incluso, quemada, un hecho que habría podido provocar un incendio muy peligroso». Aparte, asegura que un vecino llegó a denunciar a una de las alimentadoras de estos gatos porque les daba de comer. «Hay algunas personas a las cuales no les gustan los animales y se dedican a destruir las colonias, cuya función es que estos estén controlados», sostiene Herrera.

En estas colonias, creadas por los miembros de la asociación y voluntarios con dinero de su bolsillo y donaciones, dan de comer a los gatos, construyen un espacio donde puedan dormir, se les medica y se los esteriliza para que no se puedan reproducir. «El Ayuntamiento nos había incluido en el programa piloto de esterilización y ya habíamos esterilizado 23», comenta Herrera. Finalmente, el animalista explica que lo que quieren es concienciar de que su trabajo sirve para que estos gatos estén controlados y avisar a la gente del peligro que supone que tiren veneno por la zona de la calle Miquel Servet. «El viernes nos reuniremos con el Ayuntamiento, y a principios de esta semana, si podemos, pondremos carteles por el barrio advirtiendo de lo que ha pasado», señala Herrera.