Sociedad
Denuncian una nueva presencia de veneno para animales en el barrio de Sant Pere i Sant Pau
El Ayuntamiento trabaja para saber si se trata de sustancias tóxicas o bien es una falsa alarma
Los vecinos de Sant Pere y Sant Pau encontraron sustancias que podrían ser venenosas en varios puntos del barrio entre la mañana de ayer y la tarde y noche del miércoles. Ante el riesgo que suponía para peatones y, sobre todo, para animales, el Ayuntamiento limpió las zonas y envió el polvo a un laboratorio con el fin de dictaminar si se trataba de una sustancia tóxica o bien era una falsa alarma. A raíz de esta situación, la asociación RodoGatSPerePau notificó que tenían casi una veintena de gatos intoxicados, muertos o desaparecidos. Cuando menos, este se trata de un nuevo episodio de estas características en este barrio. Después de vivir algunos destrozos, una de las colonias controladas de gatos ferales de la calle Miquel Servet fue víctima de un envenenamiento el pasado 27 de junio, en el cual murieron dos gatos. También desde hace unos cuantos días, cuatro perros del barrio están ingresados por intoxicaciones.
La consejera de Bienestar Animal del Ayuntamiento de Tarragona, Elvira Vidal, movilizó ayer por la mañana todos los recursos para ponerse manos a la obra con el nuevo episodio. Así, se desplazaron a Sant Pere y Sant Pau la Unitat de Medio Ambiente de la Guardia Urbana, la veterinaria municipal con el fin de recoger muestras –que se enviaron a un laboratorio externo– y la Brigada de Limpieza. Los equipos se tuvieron que desplegar a los nueve puntos en los cuales se detectaron sustancias a priori tóxicas, de color blanco y cerca de árboles y plantas: las calles Violant d'Hongria, Països Catalans, Miquel Cervet, en la rambla de Sant Pere i Sant Pau, en la carretera del Pont d'Armentera, en los bloques Sant Felip y Chile, antela iglesia del barrio y en la zona de bosque próxima a la Salle.
«Esta vez no había polvo en las colonias de gatos, sino en varias zonas del barrio», detallaba Gloria Herrera. La presidenta de RodoGatSPerePau lamentaba no saber «quién ha sido». «No sabemos si es alguien que se dedica a asustar», decía Herrera, que apuntaba que «se podría sospechar que es la misma persona que envenenó las colonias de gatos». Pocas horas después de detectar las sustancias, Herrera afirmaba que las que estaban junto a la Salle eran de yeso, que no es letal, pero sí muy irritante en animales.
La preocupación no sólo se centraba en los animales, ya que, según Herrero, «también lo es para las personas, ya que los niños que juegan a pelota se podrían intoxicar, o bien si lo pisas te lo puedes llevar en casa». «A ver si podemos encontrar al responsable y que se detenga eso», decía la presidenta de RodoGatSPerePau, que advertía que esta práctica se trata de «uno delito contra la salud pública».