Municipal
La licencia para el aparcamiento de autocaravanas en la Oliva de Tarragona no se podrá denegar
El terreno junto al mirador de la Oliva es suelo urbanizable, por lo que el proyecto tendría luz verde
El aparcamiento de autocaravanas a los pies del mirador de la montaña de la Oliva en Tarragona acabará siendo, presumiblemente una realidad. Los intentos de los vecinos de esta zona de parar el proyecto llegarán al pleno municipal de hoy, de la mano de dos mociones asumidas por el PSC y los concejales no adscritos Sonia Orts y José Luis Calderón. No obstante, las reivindicaciones se quedarán muy probablemente sin efecto. El aparcamiento podrá salir adelante si finalmente la Comisión Territorial de Urbanismo del Ayuntamiento de Tarragona aprueba la licencia provisional, hecho prácticamente seguro en lo que queda de 2021. En caso de no hacerlo, el consistorio podría incurrir en un delito, ya que el terreno en cuestión, de titularidad privada, es suelo urbanizable.
En efecto, este terreno en la montaña de la Oliva se ubica dentro del Plan Parcial 5 de urbanismo, que establece que el suelo es urbanizable. El PP-5 estaba amparado no sólo por el POUM del 2013 –anulado desde hace unos meses y, por lo tanto, no vigente–, sino por el de 1995, que es el que prevalece en estos momentos. Uno de los usos regulados dentro de las licencias provisionales es, precisamente, «la prestación de servicios particulares a los ciudadanos como el aparcamiento de vehículos». Además, este tipo de licencia obliga los proyectos a hacer unas instalaciones de carácter provisional y a no dificultar la ejecución del planeamiento urbanístico.
Teniendo en cuenta estas circunstancias, tanto la ordenación urbanística anulada como la vigente facilitarían la ubicación del aparcamiento de autocaravanas al lado del mirador de la Oliva. La empresa que lo quiere impulsar hace años que lo solicitó, pero la Comisión Territorial de Urbanismo ha ido recortando partes del proyecto. La última de las versiones se adecuaría finalmente a la legalidad urbanística, por loque el consistorio no puede evitar conceder una licencia provisional para la instalación del parking si tiene un informe favorable sobre la mesa. El problema reside, según se apunta desde el Ayuntamiento, en el que la montaña de la Oliva haya sido suelo urbanizable desde hace décadas y que no se haya intentado cambiar en ninguno de los planeamientos urbanísticos anteriores. Así pues, la luz verde no corresponde a una voluntad política, sino a una cuestión legal.
De esta manera, el aparcamiento de autocaravanas en la Oliva podría ser una realidad este mismo año. En un inicio el promotor privado pretendía instalar 87 plazas, permitir la pernoctación, servicio de ducha y poder comer en el exterior de la autocaravana, con mesas y sillas. Los continuos informes desfavorables han acabado recortando el proyecto. Así, el parking ejercerá tan sólo como tal, con un total de 37 plazas en las cuales sólo se podrá aparcar durante el día y no se podrá dormir. Cuando menos, se instalará suministro de luz, agua y aguas sucias.
Oposición vecinal
La Asociación de Vecinos de la Oliva ha pedido en reiteradas ocasiones que no se permita ubicar el parking en su barrio. Además, el miércoles pidieron la dimisión del consejero de Territori de l'Ajuntament de Tarragona, Xavi Puig. Los vecinos esgrimendos motivos para oponerse al proyecto. Por una parte, su presidente, Paco Inglada, aseguraba al DiariMés que «el terreno es estrecho y escaso», por lo que sería peligroso. Por otra parte, también preocupa la proximidad del antiguo fortín de la Oliva, del siglo XVIII, y del cementerio de Tarragona.