Las autoescuelas de Tarragona se ven afectadas por la quinta ola

La quinta ola de la pandemia de covid-19 ha afectado a varios sectores, especialmente aquellos relacionados de forma más o menos directa con la juventud, una franja de edad que ha sido la última a poder vacunarse. En efecto, las autoescuelas de Tarragonaestán acusando las últimas semanas el aumento de contagios, que se ha registrado especialmente entre los jóvenes. A consecuencia del incremento de casos positivos, se han tenido que aplazar clases y exámenes, tanto del ámbito teórico como del práctico. Las pruebas que dan acceso al carnet de conducir son el elemento más vulnerable, ya que están programadas con bastante antelación. Así, un alumno que no puede examinarse porque está confinado, ya sea por ser positivo de coronavirus o por ser un contacto directo, tiene que esperar aproximadamente un mes desde la fecha inicialmente prevista con el fin de poder examinarse.

Se ha notado mucho que hay muchos alumnos que están confinados. Mucho más que durante otras olas de la pandemia», explicaba Carlos Trujillo. El vicepresidente de la Asociación de Autoescuelas de Tarragona, también director de la Autoescuela Erandio de Torreforta, aseguraba que sólo la semana pasada había tenido dos alumnos de teórico y uno práctico confinados. «Sobre todo han dejado de venir alumnos de la teórica», decía Trujillo sobre una de las partes que se puede hacer telemáticamente, sin necesidad de ir a la autoescuela. A pesar del elevado número de contagios entre los alumnos –que no se producirían ni en el coche, ni en el aula–, esta situación no está afectando al profesorado. «Los contagios entre profesores son muy puntuales, no ha habido problemas», defendía Trujillo.

Los confinamientos han dejado a muchos alumnos sin poder subir a examen. «La Dirección General de Tráfico en Tarragona no nos ha puesto ninguna traba, simplemente corre la convocatoria», detallaba el vicepresidente de la Asociación de Autoescuelas de Tarragona. Así, una persona que ahora se pierde el examen de conducir por culpa de la covid-19, tiene que esperar en torno a un mes por poderse finalmente presentar. En estos momentos, en condiciones normales, en la ciudad se examinan alumnos cada dos semanas. Un alumno que suspende tiene que esperarse unas dos o tres convocatorias por término medio para poder volver a presentarse. Con todo, la primera quincena de agosto no se llevarán a cabo exámenes de conducir, ni teóricos, ni prácticos.

Por otra parte, el notable número de alumnos a los cuales un confinamiento les está suponiendo un obstáculo a la hora de sacarse el carnet de conducir no está afectando económicamente a las autoescuelas. Eso se debe al prepago que se hace de las clases teóricas y prácticas y que, en estos casos, tan sólo se aplazan para más adelante. «Tenemos mucha lista de espera para empezar prácticas», concluía Trujillo.

Un julio más flojo

Tradicionalmente, el verano ha estado el periodo más solicitado por los jóvenes a la hora de sacarse el carnet de conducir. Se trata de una época sin clases en la cual, además, los tarraconenses que estudian fuera retornan mayoritariamente en la ciudad para pasar buena parte de las vacaciones. No obstante, este año el mes de julio está siendo más flojo de lo que es habitual. No ha disminuido el número de jóvenes que se quieren sacar el carné, sino que la demanda se ha esponjado a lo largo del año. Este último curso universitario estuvo marcado por las clases telemáticas, de manera que muchos estudiantes de universidades lejos de Tarragona se quedaron en la ciudad para dar clase desde casa. Eso benefició de rebote las autoescuelas tarraconenses. Además, este verano «el carné no está siendo prioritario después de la apertura de las restricciones», apuntaba a Trujillo.