Los hoteleros prevén una ocupación del 80% este agosto en Tarragona
En condiciones normales, en agosto la ocupación acostumbra a ser del 95%, aunque el año pasado esta no pasó del 35%
Los hoteleros de Tarragona prevén un buen mes de agosto, que empieza este domingo, y el cual estiman que suponga una ocupación del 80% de las plazas hoteleras de la ciudad. Las aspiraciones dependen de conseguir dejar de lado los efectos de la quinta ola de la pandemia en cuanto a visitantes llegados a Tarragona, cosa que hasta ahora se ha conseguido notablemente. La previsión del 80% quedaría todavía lejos de un agosto normal, cuando el empleo|ocupación ronda el 95%. No obstante, serían unas cifras mucho mejores que las del año pasado, cuando tan sólo se alcanzó el 35%. El turismo catalán y nacional seguirá suponiendo el mayor grueso de los visitantes, aunque los hoteleros esperan que aumente ligeramente el número de extranjeros.
En estos momentos, las reservas ya efectuadas se suben hasta la mitad de ocupación de cara al mes de agosto. Conseguido este 50%, «la aspiración es llegar hasta el 80%, más o menos, se tiene que ver», explicaba Xavi Jornet. El presidente de la Asociación de Hoteles de Tarragona (AHT) admitía en declaraciones en el Diari Mésque hay «cierta incertidumbre», aunque «no es la misma del año pasado». Los hoteleros de la ciudad se guían por los datos de los últimos años y las reservas ya hechas para apuntar que el pico de visitantes se producirá «entre la segunda y la tercera semana», es decir, desde aproximadamente el 5 de agosto hasta las fiestas de Sant Magí. Los momentos de menos demanda se producen a la cabeza y a la cola del mes, es decir, al cambio entre julio de agosto y la última semana. «Incluso el año pasado, en qué tuvimos mucha menos demanda, las variaciones de ocupación se repitieron», detallaba Jornet.
Mientras tanto, las previsiones de cara a septiembre, al final de la temporada estival, no son tan optimistas. «Siempre era un muy buen mes, pero de momento este año no arranca», admitía Jornet. No obstante, el presidente del AHT recordaba que, durante la pandemia, «la gente no hace previsiones a medio plazo, sino que va muy a última hora». Así, Jornet avisaba de que «todo lo que está fuera de la temporada fuerte, en julio y en agosto, está complicado». La palabra escogida por el representante de los hoteleros era «incertidumbre».
Hasta ahora, la quinta ola ha afectado a los hoteles tarraconenses menos de lo que esperaban. «Se ha ralentizado un poco el ritmo de las reservas, sobre todo la última semana, pero no creemos que haya grandes cambios, por lo que no somos pesimistas», decía Jornet, aunque admitía que «puede remontar». «Si hasta ahora ha habido cancelaciones, estas se ha compensado con reservas», apuntaba el presidente del AHT, que recordaba que cancelaciones siempre hay.
El verano de este 2021 está siendo lo bastante positivo. Entre las cifras de en julio y las estimaciones para agosto, tan sólo prevén una disminución del 15% de empleo|ocupación con respecto a los veranos anteriores a la pandemia. De hecho, este julio el ocupación en Tarragona ha llegado al 75%, cuando de normal lo hacía hasta el 90%. Los efectos no han sido tan negativos como podrían haber estado. Lo damos por bueno», concluía Jornet. La procedencia de los visitantes sigue siendo eminentemente catalana y del resto del Estado, de lugares como Valencia, Aragón, Madrid y País Vasco. El turismo nacional ha crecido. El internacional sigue siendo escaso, aunque los franceses todavía suponen un 10% del total.