Medio centenar de estudiantes de la URV colaboran en la vacunación masiva
Los estudiantes de los últimos cursos de Infermeria administran las vacunas contra la covid-19 en diferentes puntos del territorio
Una treintena de estudiantes de enfermería, que este curso y el próximo llegarán al final de la carrera universitaria, están trabajando en los puntos de vacunación masiva de Tortosa y Tarragona, así como dan apoyo en otros centros y empresas. Se encargan de preparar y administrar las dosis de la vaccinia y de controlar la sala de reposo donde tienen que esperarse las personas ya vacunadas en caso de que tengan una reacción adversa durante los primeros minutos. 26 estudiantes más de la Facultad de Medicina y Ciencias de la Salud y de primero de la Facultad de Enfermería han estado haciendo tareas de voluntarios en el Pabellón de Deportes de Tarragona.
Los estudiantes de Enfermería se apuntaron como voluntarios cuando el Departamento de Salud hizo un llamamiento a enero para preparar la vacunación masiva. Unos meses más tarde, los que cursaban tercero y cuarto se incorporaban para hacer esta tarea pero con un contrato de auxilio sanitario, como lo que ya tuvieron durante los primeros meses de pandemia los estudiantes que trabajaron en los centros asistenciales. «Empezamos con la ayuda de una enfermera que nos explicó cómo funcionaba el programa y el protocolo de la vacunación y al cabo de una semana nos pusieron por parejas de estudiantes: uno registraba en el ordenador el paciente que iba a vacunarse y el otro preparaba la dosis de la vacuna correspondiente y lo administraba al paciente», explica Candela Honrubia, estudiante de Infermeria, que estuvo en el Pabellón Municipal de Deportes de Tortosa. Pasado el tiempo, los estudiantes ya hacen directamente la preparación y administración de dosis porque un auxiliar administrativo se encarga de las tareas de registro, explica Alexandra Morari, también estudiante que estará hasta septiembre en el mismo punto.
Explican que «es un trabajo gratificante porque en el panorama actual la vacuna otorga esperanza a la población, y nosotros estamos contribuyendo- dice Honrubia-. La gente, mayoritariamente, viene muy ilusionada a vacunarse y eso te llena». Morari es de una opinión similar: «Acepté el trabajo con mucha ilusión y cada día aprendemos cosas nuevas». Añade que se trata de una «experiencia positiva pero mejorable con respecto a las condiciones». Es al fin y al cabo un aprendizaje con el cual cuentan con personal sanitario titulado, que las guía en aquello que necesitan: «Nos han hecho sentir una más del equipo y nos han dado su confianza».