La mesa de trabajo por los menores no acompañados de Tarragona empezará en septiembre

Los episodios de peleasy delincuencia en la ciudad durante los últimos meses, especialmente en la Parte Alta, llevaron al Ayuntamiento de Tarragona a pedir la colaboración directa y más implicación de las administraciones superiores. Esta llegará en forma de mesa de trabajo este septiembre. En un momento en que cada vez más miradas apuntaban hacia los menores no acompañados y los jóvenes extranjeros que ya habían cumplido la mayoría de edad, el gobierno municipal reiteraron que hacía falta tratar la problemática más allá de la seguridad y tener en cuenta los múltiples factores que conforman la compleja situación.

En efecto, el consistorio no dispone de bastantes competencias para gestionar esta situación por sí mismo. Las conversaciones con la Generalitat para buscar una mejora de las condiciones de estos jóvenes –y, así, evitar que caigan en un contexto conflictivo– han llegado en buen puerto y la primera reunión será el próximo mes. La puesta en marcha se ha retrasado a causa de los respectivos cambios de gobierno al Ayuntamiento y a la Generalitat, además de las vacaciones estivales. Este espacio reunirá las administraciones municipal y catalana y no sólo se centrará en la seguridad –Guardia Urbana y Mossos d'Esquadra, aunque no se contempla la presencia de otros cuerpos policiales–, sino que tendrá la voluntad de tejer una respuesta con varios enfoques. Así, se buscarán políticas reactivas, pero sobre todo preventivas.

«Interior se comprometió a hacer una mesa de trabajo de manera transversal con todos los departamentos para afilar la aguja. Mientras tanto, aquí ya se había empezado a trabajar con el programa 360», contextualizaba por Diario Más Cristina Guzmán. La consellera de Seguridad Ciudadana en el Ayuntamiento de Tarragona explicaba que «nos hemos encontrado un fenómeno que hasta ahora no se había tenido en Tarragona, como sí que ha pasado en otros sitios, y eso se tiene que trabajar». «Tenemos que ir poniendo soluciones a todas las problemáticas, pero no se tiene que estigmatizar nadie», advertía a Guzmán. Sobre los menores no acompañados y los jóvenes extranjeros que ya han cumplido la mayoría de edad, la consellera de Juntos recordaba que «todos nos podríamos encontrar en esta situación. Unos hemos tenido la suerte de nacer en un lugar, y otros no».

Desde el Ayuntamiento se ha remarcado recientemente la necesidad de que la Generalitat tiene que redoblar los esfuerzos: «Estos chicos vienen de sus países y no tienen ninguna persona, ni familia, ni formación, ni educación... Vienen de una cultura muy diferente. A la hora de acogerlos, la Generalitat tiene que estar preparada para integrarlos, formarlos y prepararlos por el mundo laboral». Hoy por hoy, cuando los menores no acompañados hacen los 18, salen de la tutela y «no pueden acceder a ningún lugar de trabajo porque no tienen la documentación, que no se regulariza desde el Estado,» recordaba a Guzmán. Sin perspectivas laborales, la consellera apuntaba que «se les asoma a la calle, a delinquir», ya que, «si no tienen como sobrevivir o un lugardonde dormir, qué tienen que hacer»?. En cuanto a la estigmatización de este colectivo, Guzmán incidía en el hecho que «de los que han iniciado una carrera delictiva, habrá un 5% que continuará, tal como hacen todos los nacionales y otros países».