Ricomà «Sólo con el control de la pandemia podemos recuperar las libertades»

El alcalde de Tarragona, Pau Ricomà, asegura no entender la decisión del Tribunal Superior de Justícia de Catalunya de revocar las medidas de la Generalitat de Catalunya que pedía mantener el toque de queda en ciudades como Tarragona. Ricomà manifiesta que «hemos vivido dos noches muy complicadas por causa de los botellones y el incivismo. Hay una clara relación entre el levantamiento del toque de queda. Me preocupa la ciudadanía y ahora mantenemos una carrera entre el ritmo de las vacunaciones, que se ha frenado, y la expansión del variante Delta. Sólo así podremos recuperar todas las libertades». El alcalde de Tarragona apela a la responsabilidad y al civismo para evitar las elevadas concentraciones de personas.

El alcalde de Tarragona remarca que «hemos aplicado medidas proporcionadas para erradicar las situaciones de incivismo de las zonas de Tarragona con más concentración demográfica. Queremos crear el contexto donde se puedan recuperar el ritmo de vacunaciones y más cuando estamos a las puertas del inicio del curso escolar. Tenemos que conseguir la inmunidad de grupo y recuperar cuanto antes mejor la libertad, porque eso significará superar la situación en que nos obliga a vivir la pandemia».

Datos del 'Dispositiu Botellot'

Con respecto a las incidencias producidas este fin de semana, se mantiene el Dispositiu Botellot, con coordinación con Mossos d'Esquadra, que consiste en prevenir y dispersar a aquellas personas que realizan botellones incumpliendo las ordenanzas municipales y las medidas sanitarias en vigor. Este dispositivo tiene un doble objetivo: por una parte que se cumplan las medidas sanitarias y municipales y, de la otra, contribuir al descanso de los vecinos. En concreto, viernes 20 de agosto la Guardia Urbana no detectó ninguna concentración de personas consumiendo alcohol ni en el Camp de Mart, ni en el parque del Francolí, ni a la ermita de la Salud, ni en la explanada del suelo que toca en el cementerio, ni en el Vall de la Arrabassada, junto a la ITV. En cambio, se concentraron entre 200 y 300 personas en la playa de la Arrabassada. La Guardia Urbana también detectó a un grupo de 200 personas en la playa Llarga y un centenar más al estacionamiento de la playa del Miracle.

Con respecto al sábado, 21 de agosto, se detectaron 80 personas en la playa Llarge, y 200 más al estacionamiento del Miracle y un millar de personas se concentraron en la playa de la Arrrabassada. Guardia Urbana, conjuntamente con Mossos d'Esquadra, desalojaron la playa a las 4.20h. lo cual provocó molestias vecinales así que se iban marchando en dirección la Vall de l'Arrabassada y Vía Augusta, unos problemas que fueron resolviendo los agentes de la policía sin más problemas. Finalmente, esta madrugada no se ha producido en la ciudad ningún botellón, ni al centro de la ciudad ni a las playas.

ElDispositiu Botellot consiste en realizar rondas de vigilancia y controles en los diferentes distritos de la ciudad. En Llevant se vigila y se hacen controles en la ermita de la Salut. En el distrito Norte se controla la Oliva, el parque de la Muntanyeta – Pedrol, la zona del detrás del Centre Cívic de Sant Pere i Sant Pau y el Pont del Diable. En el distrito Ponent se hacen vigilancias en el polígono comercial Les Gavarres, en torno al parque de La Coma y parques y plazas de los diferentes barrios. En el distrito Eixample se vigila el parque de Tarragona 2 y el parque del Francolí. Y finalmente en el distrito Centre se hacen controles en el Camp de Mart, Parc Saavedra, Cr. Josepa Massanes y parking disuasivo del Cementiri.