Comercio
El descenso de clientes y las tasas impiden a los marchantes renacer en Tarragona
La FAVT mantiene conversas con ESPIMSA para dar respuesta a esta situación que afecta a los paradistas del mercado
Los marchantes de Tarragona no pasan por el mejor momento y cada vez son más los paradistas del mercado de Bonavista con dificultades para cubrir gastos. Las pérdidas que acarrean derivadas de la crisis por la pandemia, el descenso de clientes por los nuevos hábitos de consumo y las tasas que tienen que afrontar para montar las paradas en el mercado limitan considerablemente su margen de beneficio. De hecho, ya son muchas las paradas que han tenido que cerrar y, desde la FAVT, apuntan que están en conversaciones con el Ayuntamiento para encontrar soluciones.
Juan Benítez, el representante de la mesa de comercio de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Tarragona (FAVT) y presidente de Marxants TGN, apunta que la situación en los mercados es «floja» y que, para reactivarlos, hacen falta «unas tasas razonables». Benítez lamenta que algunos paradistas han tenido que cerrar las paradas, ya que no pueden afrontar los precios, pero apunta que, desde la Empresa de Servicios y Promociones de Iniciativas Municipales (Espimsa), se están moviendo en este sentido. «En Espimsa están por la labor», apunta. El representante de la FAVT afirma que, «desde la mesa de comercio de la FAVT se está trabajando con Espimsa para una mejora económica que rebaje la presión por los gastos que afrontan», dijo.
«Hay paradistas que han tenido que cerrar y muchos que lo harán pronto. En Bonavista y en la plaza Corsini hay paradas en subasta porque la gente no puede aguantar estos impuestos para montar la parada, no les compensa. En el mercado de Bonavista se ven sitios vacíos», explica. «Los mercados de la provincia de Tarragona son de los más caros. Hay gente en otras zonas que paga en un año lo que aquí te cuesta sólo un trimestre», recalca.
El responsable de comercio de la FAVT también atribuye al aumento de las compras por Internet al descenso de visitantes y considera que «se tiene que potenciar y hacer atractivo el mercado». Benítez también destaca que los mercados contribuyen a la economía de toda la zona. «Donde hay un mercado, cerca crecen los negocios», ya que se incrementa el flujo de gente y porque los mismos paradistas consumen a los negocios de la zona. El representante de la FAVT considera que la transformación digital también puede ayudar en los mercados y, en este sentido, destaca herramientas comoMercaWeb , un sistema destinado en venta de productos en línea por parte de los marchantes o el aplicatiu Somos Comerç TGN , que permite consultar información sobre la localización, los productos y servicios que ofrecen los comercios de Tarragona.
El conseller de Comercio, Mercados, Ferias y Consumo del Ayuntamiento y presidente de Espimsa, Dídac Nadal, afirma que, desde que su grupo municipal hacerse cargo de la conselleria, hay un escenario de mejora y adecuación de los mercados y mercadets y destaca las campañas que han llevado a cabo para incentivar el comercio. Nadal apunta que, a causa del contexto de dificultad que atraviesan los marchantes por culpa de la covid, «se están manteniendo conversas a través de la FAVT para ver si se puede echar una mano, ya que somos conscientes de que se han encontrado en una situación muy delicada generada por la pandemia.»
Jesús Vázquez, que tiene una parada de calzados en el mercado de Bonavista, ha notado una disminución de la afluencia de gente en los últimos tiempos. Vázquez lamenta las dificultades que tiene para cubrir los gastos a causa de las tasas que tiene que pagar y a la competencia que le hacen algunos vendedores ilegales. «La situación está bastante mal, en parte que pagamos mucho para tener parada en el mercado, no nos dan muchas facilidades para montar la parada», lamenta. «Yo pago los impuestos que me corresponden, 100 euros sólo para montar la parada hoy, no cubro los gastos y, encima, tengo que ver cómo se ponen vendedores ambulantes ilegales que no pagan impuestos», critica. «Ellos no pagan impuestos y vienen más que nosotros», critica al paradista. «Creo que la degradación del mercado es uno de los motivos que ha propiciado que baja la afluencia de gente que viene al mercado», comenta, haciendo referencia a la presencia de algunas paradas con ropa de segunda mano, o género de baja calidad.
«Se tendrían que reestructurar los precios de las paradas, con esta crisis se hace muy complicado llegar a pagar todo lo que se tiene que pagar, se paga mucho», dice Miguel Garriga, responsable de un punto de venta de ropa en el mercado de Bonavista. Garriga también ha notado el descenso de visitantes. «Con la covid, a la gente le cuesta más venir», lamenta. El paradista también apunta que «antes venían muchísimos turistas, pero dejaron de venir porque había carteristas y los vaciaban».
Juan de la Torre, que tiene un puesto de fruta y verdura en el mercado, explica que, desde la pandemia, ha bajado mucho la presencia de visitantes al mercado. «Desde la pandemia ha empezado a bajar la afluencia de gente y, ahora mismo, está muy flojo, ya no es lo que era y dudo de que vuelva a estar como antes», explica. El paradista también indica que se ha notado el descenso de turistas con respecto a años anteriores y, este hecho, ha afectado en la parada durante la temporada de verano. De la Torre también cree que los nuevos hábitos de consumo como las compras por Internet uno de los motivos de este descenso. «Este verano se ha notado mucho respeto a anteriores, ha sido una bajada muy bestia, ojalá remontara, pero veo muy complicado», explica. «No sólo es la pandemia, la gente está cambiando el chip, la venta en mercado se asocia más a las personas mayores, ahora la gente va más a las grandes superficies». También afirma que, al bajar el número de clientes, a algunos paradistas no les es rentable montar la parada y apunta que el mercado de Bonavista es «uno de los más caros» para hacerlo.