Sant Pere i Sant Pau exige más atención presencial a las entidades bancarias

La plaza de la Cuarta Promoción de Sant Pere i Sant Pau ha sido este domingo el epicentro de la reivindicación de un aumento de la atención bancaria presencial. Casi 300 personas, entre las cuales había las patrullas cívicas voluntarias del barrio, se han concentrado para instar en el Parlament de Catalunya y en el Congreso de los Diputados en mejorar la atención que reciben las personas de edad avanzada en las sedes bancarias. La brecha digital ha perjudicado considerablemente los mayores de la sociedad, hecho que se ha visto acentuado a causa de la covid-19, ya que la digitalización de la banca –y también de forma generalizada– se ha potenciado todavía más.

Todo ha hecho que las personas mayores tengan problemas para retirar dinero de los cajeros automáticos por dos motivos. Por una parte, muchas personas de edad avanzada no tienen bastante destreza con la tecnología para hacer funcionar correctamente un cajero automático, por lo que necesitan la atención de personal bancario, tal como pasaba antes. Por otra parte, algunos ancianos se sienten desprotegidos a la hora de ir a retirar dinero de los cajeros que se encuentran a pie de calle y tienen miedo de sufrir robos. De hecho, en Sant Pere y Sant Pau hubo unos cuantos, hasta que la aparición de las patrullas vecinales en primavera ha hecho que no se vuelvan a producir.

La reivindicación, encabezada por las asociaciones de vecinos de Sant Pere y Sant Pau y la Unión, llegó al último pleno del Ayuntamiento de Tarragona. El consistorio hizo una declaración institucional en apoyo del movimiento. Los afectados ahora tienen la voluntad de llegar primero al Parlamenty, después, al Congreso, con el fin de conseguir una ley que obligue a las entidades bancarias a disponer de un mínimo de personal físico en sus sedes.

«Hemos sido el primer barrio que se ha puesto a trabajar este tema y esperamos que sea una bola que crezca y acabe llegando a toda España», expresa Gabriel Muniesa. El presidente de la Asociación de Vecinos La Unión asegura que, de momento, «asociaciones de otros lugares de Cataluña ya se han puesto en contacto» con las dos entidades vecinales de Sant Pere i Sant Pau para poner remedio en la brecha digital que afecta a las personas mayores.

Actualmente, el movimiento en el barrio tarraconense ya ha superado a la cuarentena de voluntarios. Este domingo se han sumado más de 200 vecinos más –entre ellos, los motoristas de Picapiedra Bikers, que añadieron ruido a la concentración– para darles apoyo en esta causa. «Eso es finito. Esperamos llevarlo a buen puerto. De momento, ya hemos conseguido que haya más policía andando por aquí, con una pareja de la Guardia Urbana, y que CaixaBank haya prometido disponer de un asesor sénior», celebra Muniesa.