Sociedad
Más de 1.100 personas ya han pasado por la piscina climatizada Sylvia Fontana en 24 días
La instalación olímpica ha tenido una buena respuesta por parte de los usuarios desde que abrió el pasado 4 de octubre
La piscina olímpica al aire libre y climatizada Sylvia Fontana, situada en la Anilla Mediterránea de Tarragona, ha tenido una buena respuesta de los usuarios desde que se inauguró con la climatización finalizada el pasado 4 de octubre. En sólo 24 días la piscina ya ha sido utilizada 1.100 veces y ya se han llegado contabilizar hasta 92 usuarios en un día. El hecho de que sea una piscina olímpica de 50 metros de largura y 10 carriles, que el agua esté climatizada y que esté al aire libre convierte la instalación en un lugar privilegiado por los amantes de la natación. La piscina, a pesar de ser exterior, mantiene el agua a una temperatura adecuada para el baño los meses de otoño e invierno gracias a una caldera de biomasa.
La consejera de Deportes, Maria José López, celebra que «la respuesta por parte de la gente ha sido fantástica» y que las instalaciones son utilizadas cada vez por más personas, una vez la prueban, vuelven a repetir. «Las personas usuarias están contentas, cada día hay más asistencia y la gente que en un principio no lo veía claro, en el momento de probarla ya se quedan», apunta. La consejera detalla que «abrimos una media de 6 horas diarias con una asistencia media de 45 personas» y destaca que «el día que más gente tuvimos fueron 92 personas». Maria José López afirma que el perfil de usuario que frecuenta la piscina Sylvia Fontana es muy variado. «Tenemos de todos los perfiles, desde el deportista que se prepara por triatlones, natación máster, el usuario que hace uso como salud. También es importante remarcar que ya tenemos reservas realizadas por el uso de la piscina por parte de equipos de natación extranjeros», explica.
Mercè Mulet, coordinadora de actividades acuáticas del Patronato de Deportes, señala que la piscina ha tenido un recibimiento muy positivo y que «la gente está muy contenta de poder disponer de la piscina climatizada». Molet destaca que muchos de los usuarios vienen ahora para entrenar, para hacer deporte, pero señala que también tenemos usuarios que no compiten. «La piscina está abierta para todo el mundo con cita previa, por motivos de la covid», explica. La coordinadora de actividades acuáticas señala que, más adelante, dispondrán de una lona que, a las noches, se pondrá por encima el agua y contribuirá a mantener la temperatura del agua a unos 26 grados con ahorro energético. Mulet explica que equipos de natación de Suiza, Francia, Alemania y otros países europeos ya se han interesado por venir a entrenar en esta piscina.
«Voy viniendo a la piscina habitualmente porque estoy en fase de rehabilitación, me operaron de la cadera y aprovecho la piscina el máximo que puedo. Ya que está abierta, que la tenemos aquí y que podemos disfrutarla, pues lo aprovecho. Y realmente, para aquellas personas amantes de la natación –como yo– es una joya disponer de este espacio», explica Eduard Miralpeix, un usuario que hace cuatro años que no compite, pero que lo había hecho como nadador máster. Miralpeix asegura que los meses más fríos seguirá aprovechando la instalación, ya que la temperatura del agua es «perfecta». «En invierno no será ningún problema venir aquí, vendré en diciembre, en enero, la temperatura del agua es perfecta para lo que nos gusta nadar, no está ni un punto frío ni caliente». «Espero disfrutar durante todo el año de la piscina olímpica», concluyó.
«Vengo muy a menudo, cinco o seis días a la semana en la piscina», explica Santi Jané desde el agua, un nadador que hace travesías a mar abierto todos los veranos como afición. «A los que nos gusta la natación, poder nadar al aire libre de esta manera los meses de enero o febrero no tiene punto de comparación. Con esta temperatura del agua y el solito que hace es genial», destaca, recalcando que «seguiré viniendo los meses de invierno, es espectacular esta piscina». «La piscina del Reus Ploms es olímpica, pero no está climatizada, a partir de octubre ya no se tira nadie», detalla el usuario. Sobre la afluencia de gente, Jané apunta que a primera hora de la tarde no hay demasiada gente, pero que se va llenando a partir de las cinco o seis de la tarde, tan pronto como la gente termina de trabajar.