Los barrios de Ponent de Tarragona sufren una ola de forzamientos en puertas de coches

En plena polémica vecinal sobre la seguridad en la ciudad de Tarragona, los barrios de ponent están sufriendo una ola de forzamientos en los coches. Con la intención de robar, más de una decena de vehículos han aparecido en las últimas semanas con signos de violencia, con puertas forzadas o ventanas rotas. El último caso, y de los más numerosos detectados hasta ahora, fue la pasada madrugada del domingo, cuando se encontraron seis vehículos con las puertas y cristales rotos en la calle del Río Llobregat, en el barrio de Campclar. Según asegura Inés, hermana de una de las vecinas afectadas, se trata de una situación que ya está ocurriendo recurrente en los barrios de Ponent. «Cada vez hay más intentos de robos, esta noche hemos sufrido seis en la calle del Río Llobregat, pero en la calle de Tordera también han aparecido coches forzados», aseguraba la vecina, haciendo referencia a otros barrios que se encuentran con esta situación, como pueden ser Torreforta o el Pilar.

Según Inés, los ladrones fuerzan los vehículos «sólo para ver si encuentran alguna cosa porque, como es obvio, ya no dejamos nunca nada a la vista». «A mi hermana sólo le han cogido un par de monedas que tenía guardadas para pagar el parking, pero ahora todo el lío para arreglar el coche es lo peor de todo», remarcaba la familiar de la afectada. Los conductores de los vehículos que quedaron afectados la madrugada de ayer interpusieron denuncia a los Mossos d'Esquadra, los cuales registraron los coches y buscaron alguna prueba, como huellas dactilares, con el fin de encontrar a los culpables, según explica la vecina.

Una inversión esperada en el barrio

Los vecinos aseguraban que hacen falta más efectivos policiales durante las noches en los barrios de Ponent, señalando que, con más vigilancia, «no habría tanta delincuencia». Ante este pensamiento, algunos ciudadanos se estarían replanteando la opción de organizar patrullas vecinales con el fin de actuar por su parte ante la inacción –según su visión– de las fuerzas de seguridad.

Con esta posibilidad sobre la mesa, el presidente de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Tarragona (FAVT), Alfonso López, gritó a la tranquilidad: «Entendemos que haya inquietud entre los vecinos, pero queremos que la Guardia Urbana y a los Mossos d'Esquadra trabajen tranquilos», pidiendo que los vecinos dejaran esta tarea «para los profesionales». López señaló buenas maneras de ayudar en el barrio, como es el caso de los voluntarios con los cajeros automáticos de Sant Pere y Sant Pau. «Hacer patrullas vecinales sobrepasa algunas líneas, además que puede ser peligroso para los vecinos, por lo tanto, no compartimos esta idea», concluía López.