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Sucesos

Se enfrenta a 15 años de prisión para violar a una mujer en un ascensor en Tarragona

En el juicio, el acusado no reconoce los hechos, pero se considera «capaz de hacerlo»

La sala de la sección 2.ª de la Audiencia de Tarragona durante el primer día de juicio.

Se enfrenta a 15 años de prisión para violar a una mujer en un ascensor en TarragonaACN

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La Audiencia de Tarragona ha juzgado este jueves a un hombre acusado de un delito de agresión sexual con penetración. Según la fiscalía, el acusado colocó una navaja en el cuello y la agredió sexualmente en el interior de un ascensor. Los hechos pasaron en octubre del 2019. En la declaración, el procesado ha asegurado que no recuerda los hechos porque consumía drogas, pero ha reconocido que podría haber cometido la violación. «No me considero a la mejor de las personas, pero soy capaz de hacerlo», ha declarado. En el juicio, los peritos policiales han certificado que los restos de ADN encontrados en el cuerpo de la víctima coinciden con las del acusado. El fiscal mantiene la pena de 15 años de prisión, mientras la defensa pide la absolución. El caso queda visto por sentencia.
Según el ministerio fiscal, el acusado persiguió a la víctima mientras ella volvía a casa, después de hacer el turno de noche al Hospital Joan XXIII de Tarragona. El individuo entró con ella en el portal del edificio y, una vez, dentro del ascensor le colocó una navaja en el cuello y la agredió sexualmente. El individuo la obligó a hacerle una felación y a tragarse el semen, según el relato de la fiscalía.

El acusado M.C ha asegurado que no recuerda los hechos y ha explicado que consume drogas –cocaína- desde «siempre». «Que estuviera drogado no justifica que no hiciera lo que se me acusa», ha declarado. «Me siento mal para no recordar el dolor que haya podido afligir a alguien, no me considero que sea la mejor de las personas, pero sí capaz de hacerlo», ha añadido.

Después de la declaración de la víctima, un agente de los Mossos d'Esquadra ha detallado que no pudieron obtener una imagen del agresor a través de las imágenes obtenidas de las cámaras de seguridad de varios edificios durante el recorrido que hizo la víctima cuando volvía hacia casa. La mujer sólo pudo hacer un retrato genérico del presunto agresor.

El policía ha indicado que a raíz de otra agresión sexual se encontraron coincidencias en la base de datos policiales, ya que el acusado autorizó que le hicieran pruebas de ADN. Además, los peritos policiales y los médicos forenses han confirmado que las pruebas bucales extraídas de la víctima durante la exploración en el hospital el día de la agresión son compatibles con el ADN del procesado.

Según el fiscal, la declaración de la víctima es «clarificadora» y la prueba del ADN es «suficiente» para mantener la pena de 15 años. En cambio, por la defensa no se ha probado que el acusado hiriera con una navaja el cuello de la víctima. También ha señalado la prueba bucal no es «lo bastante sólida». A la vez, ha sostenido que la mujer no ha podido reconoce el autor y que el hombre tiene las capacidades cognitivas afectadas por el consumo continuado de drogas.

Por todo ello, el abogado defensor ha pedido la absolución o bien que en caso de que sea declarado autor de los hechos se tengan en cuenta la inexistencia de la circunstancia agravatòria de reincidencia y la no existencia de uso de instrumento peligroso, entre otros. Por eso, ha pedido que se le aplique el grado mínimo de la demanda del fiscal, una pena entre los 6 y 12 años, en caso de que se declare su culpabilidad.

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