Sant Pere i Sant Pau abre los brazos en el nuevo Centro Cultural Islámico

Sant Pere i Sant Pau dio la bienvenida al nuevo espacio de culto, el Centro Cultural Islámico Arrahma en el marco de la I Noche de las Religiones. En su nuevo local, situado en el edificio Sant Andreu de Sant Pere i Sant Pau, la comunidad hace más de un año que se instaló, pero hasta ahora no había podido inaugurar el espacio a causa de la situación pandémica. Pero, por fin, fue este fin de semana cuando tuvieron la oportunidad de hacerlo. En este Centro Cultural, además de hacerse las cinco plegarias pertinentes a su religión, también lo utilizan como una biblioteca y como espacio donde imparten clases de árabe para los más pequeños, a la vez que de catalán y castellano para adultos, o clases de repaso de las asignaturas de la escuela. A pesar de eso, y según explicaba Mounaim Boutahar, vicepresidente del Centro Cultural Islámico Arrahma, «estamos abiertos a realizar todo tipo de actividades y a colaborar con el resto de vecinos a partir de ahora».

La inauguración se celebró este domingo, al mediodía, en una jornada de puertas abiertas donde fueron invitadas todas las entidades del barrio, además del Ayuntamiento. En esta, se celebró una breve plegaria, además de ofrecer una degustación de té y pastas a los asistentes. De entre estos, destacaba la presencia de la consellera de Nova Ciutadania, Paula Varas, y del presidente de la Asociación de Vecinos de Sant Pere i Sant Pau, Lluís Trinitat. Los dos han remarcado las ganas de la comunidad al colaborar con el barrio y abrirse a sus vecinos. «Son todas personas que hace años que viven a Sant Pere i Sant Pau, incluso tienen sus propios negocios. Ya nos conocemos entre todos y nunca han provocado ningún tipo de problema», apuntaba Trinitat. Al mismo tiempo, destacaba el hecho que están muy contentos de la abertura de este centro, ya que «es una manera de conocer más su cultura y maneras de hacer y saber qué es lo que hacen aquí dentro».

Por su parte, la consellera de Nova Ciutadania, apelaba a la necesidad y a la voluntad de «romper barreras y estigmas para visibilizar la gran diversidad que tenemos en nuestra ciudad», a la vez que apuntaba en la importancia de dar a conocer que «Tarragona es una ciudad multicultural, con muchas religiones diferentes, y para poder satisfacer todas sus necesidades, hace falta que las políticas municipales estén a la altura e incluyan a todo el mundo», declaraba.

Desde el Ayuntamiento esperan mantener una «comunicación constante y permanente» con las diversas culturas representadas en la ciudad a través de la mesa intercultural que la conselleria ha creado. Con esta, esperan resolver posibles conflictos y darles apoyo en su actividad con el fin de asegurar una mejor integración de las comunidades.