Seguridad
Nuevo episodio de robos en domicilios unifamiliares de Boscos de Tarragona
Los ladrones escogen las viviendas que creen más accesibles y se llevan, preferentemente, bisutería, joyas, dinero en efectivo y relojes
Al menos seis chalets de la urbanización Boscos de Tarragona han sufrido robos en los últimos días, el último de los cuales se produjo el miércoles pasado, mientras los propietarios estaban dentro de la casa. Los ladrones se llevan, preferentemente, dinero en efectivo, joyas, bisutería y relojes, y actúan sin preocuparse de la presencia policial.
Uno de los vecinos afectados ha indicado que «nos entraron entre las siete y las ocho de la noche, desde el jardín, aprovechando que una puerta estaba abierta. Nosotros estábamosen otra parte de la casa, y no vimos ni oímos nada. Sólo cuando nos lo encontramos todo removido, fuimos conscientes de que habíamos sufrido un robo, y avisamos a la policía». Este vecino remarca que el suyo no es un caso aislado, y que en pocos días, al menos otros cinco vecinos han sufrido situaciones similares. Los hechos se concentran en las calles Colom, Pardal, Oreneta, Cadernera e Isaac Albéniz, próximos al bosque que rodea este núcleo habitado.
«Eso hace que seamos más vulnerables», ha dicho el vecino, «porque los ladrones no se tienen que adentrar por otras calles y, cuando han obtenido alguna cosa, pueden huir fácilmente entre los árboles. En algunos casos, en el bosque se encuentran objetos abandonados, porque se dan cuenta de que tienen poco valor y no vale la pena cargarlos». Preferentemente, los delincuentes suben a los dormitorios y abren todos los cajones que pueden, en busca de dinero en efectivo, bisutería, joyas y relojes. Hasta ahora, sin embargo, no se ha producido ningún episodio de violencia personal.
El presidente de la Associacióde Veïnsde Boscos de Tarragona, Josep Anton Solé, ha dicho por su parte que, en estos casos, poca cosa se puede esperar de la policía, porque, «aunque haya aumentado la presencia de coches patrulla y de controles en los accesos al barrio, los ladrones ya conocen todos estos hábitos, y lógicamente no irán allí donde esperan encontrarlos. Por eso escogen las casas más próximas al bosque, donde poder escaparse sin muchos problemas».
Por estas razones, Solé recomienda a los vecinos que adopten medidas de autoprotección, como «rejas en la planta baja, alarmas perimetrales y perros guardianes en el jardín. Estos ladrones tienen mucho atrevimiento, y la policía no es una opción». Solé cree que sólo con estas medidas se puede aumentar la seguridad de los domicilios, porque los ladrones buscan, de entrada, las casas más fáciles, «con las alarmas perimetrales, no se atreven», insiste. Opina, también, que «este es uno de los inconvenientes que tiene el hecho de vivir en un lugar como Boscos de Tarragona. Tiene muchas ventajas, pero este problema no lo podemos negar», concluye.