Sociedad
La Operación Iglú de Tarragona atiende trece sin techo en la primera noche fría del año
Cuatro de las personas sin hogar aceptan dormir en la pensión asignada y el resto reciben mantas, gorras y bebidas calientes
La primera parada hasido las escaleras de la Catedral de Tarragona y los porches del ConsellComarcal de Tarragonès donde los voluntarios han encontrado dos sin techo. El primero ha accedido a recibir la ayuda de los voluntarios y se ha alojado en la pensión mientras que elotrono ha querido marcharse de la calle. Los dos se han bebido un vaso de caldo de pollo y un café. «Contrariamente a lo que nos pensábamos hemos encontrado en la PartBaixa a más personas y en la PartAlta donde habitualmente hay cuatro o cinco personas hemos encontrado una, y otra que no nos lo esperábamos», ha asegurado Kasser.
Según el voluntario, ha cambiado el perfil de los sin techo desde el estallido de la pandemia. Ahora, encuentran personas más jóvenes, de entre 30 y 35 años y menos extranjeros. También, explica, que ha disminuido la presencia de las mujeres en la calle. «Ya no es aquella clásica concepción que teníamos de una persona sin techo durminendoen un cajero con el perro», ha señalado Kasser. Además, dice, que el cierre de oficinas bancarias ha provocado que muchas de las personas sin hogar hayan optado por ocupar viviendas y locales. «Antes íbamos de cajero en cajero y de banco en banco y siempre había alguien, ahora hay pocos cajeros y en estos se aglutina más gente», ha detallado.
Un ejemplo es la oficina de la Caixa en la Rambla donde duermen entre seis y siete personas. «Esta noche hemos encontrado siete, no hay ninguna conflictividad y ellos mismos se comprometen a limpiar las instalaciones y se marchan por la mañana», ha indicado el sargento de la Guardia Urbana, Gustavo Citores. Sin embargo, el agente ha indicado que el sinhogarismo genera conflictos entre los vecinos en alguna zona de la ciudad. «El consumo de alcohol y las peleas entre ellos también provocan conflictos a veces», ha añadido.
Después de recorrer las calles durante dos horas, los voluntarios han cerrado hacia una de la madrugada la búsqueda de posibles usuarios en la zona de la playa de la Arrabassaday del Miracle. Los agentes de la policía han seguido durando unas horas más la actuación. «Me pensaba que habría más usuarios que requerían el servicio, pero ha sido una noche bastante tranquila», ha valorado el sargento. El Ayuntamiento localizó a 77 personas que dormían en la calle en un recuentopasado.