'Mayores seguros' quiere conseguir la ley para regular el servicio bancario

La plataforma de reivindicación vecinal Mayores seguros para la mejora de las condiciones en el servicio de las entidades bancarias asegura que no pararán hasta conseguir una ley que regule los servicios mínimos de atención al cliente. Durante la concentración que la plataforma celebró ayer al mediodía en la plaza de Cuba de Sant Pere i Sant Pau, el poratveu de la plataforma, Gabriel Muniesa, aseguró que «no nos detendremos hasta que nos hagan caso. Soy muy tozudo, ya me conocéis. Si se nos cierra una puerta, probaremos otras vías». Muniesa se pronunció sobre la avalancha de firmas que obtuvo Carlos San Juan, el jubilado que a través de change.org alcanzó más de 600.000 firmas para hacer que los bancos mejoraran sus servicios. «Celebro que algunas entidades bancarias se hayan movido ante esta gran demanda de la ciudadanía. Sin embargo, creo que no será suficiente», aseguraba. Parael portavoz, es muy importante conseguir la ley que regule «para siempre» la atención al cliente por parte de las entidades, ya que «ahora han anunciado una serie de mejoras, pero que, aparte de insuficientes, tiene pinta que durarán sólo unos meses hasta que la ciudadanía se tranquilice».

En este sentido, Gabriel Muniesa también denunciaba que no todas las empresas habían declarado que harían cambios: «BBVA no se ha pronunciado. Sólo con la ley obtendremos que todas las empresas se tengan que mover».

La plataforma está a la espera de poder comparecer el 7 o 8 de marzo en la cámara del Senado para exponer su lucha. «Con eso, esperamos poder llegar al Congreso de los Diputados y poder mantener una reunión con la Moncloa. Sant Pere i Sant Pau llegará lejos, no nos detendremos hasta alcanzar esta esperada ley», remarcaba Muniesa.

La agrupación de voluntarios Mayores seguros empezó el pasado mas de mayo del 2021 cuando las personas mayores iban a sacar dinero a los cajeros automáticos sufrían robos constantemente. Desde aquel momento, la plataforma controla dos días en el mes que los pensionistas puedan acudir a los locales de entidades bancarias del barrio sin miedo a sufrir alguna agresión. De hecho, desde que se realizan estas guardias de vigilancia, en el barrio no se ha registrado ningún otro robo de este tipo.

Sin embargo, los vecinos han notado la pérdida de servicios en el barrio. «En poco tiempo han cerrado cuatro oficinas, quedan muy pocas y, además, no te ofrecen la opción de ser atendido a la ventanilla», aseguraba Andrés, vecino de Sant Pere i Sant Pau.