El Arzobispado se abre a ceder el jardín bajo la falsa braga para hacer un hotel de lujo en el Seminario

El Arzobispado de Tarragona habría aceptado ceder el paseo de la falsa braga de la muralla de la ciudad al Ayuntamiento para conseguir los permisos para convertir el actual Seminario en un nuevo hotel de lujo. Tal como ha declarado el conseller de Territori, Xavier Puig, a DiariMés, el Arzobispado está de acuerdo al ceder el paseo ajardinado que hay bajo el paseo arqueológico a cambio en que el Ayuntamiento los otorgue los permisos adecuados para poder transformar el Seminario en una establecimiento hotelero. Sin embargo, según el conseller, la decisión ahora se encuentra en manos del Vaticano. Puig relata que el Arzobispado de Tarragona accedió a hacer el cambio y desde la Conferencia Episcopal de Madrid también dieron el sí. A pesar de todo, «desde la Santa Sede aseguraron que necesitarían unos años para estudiarlo», hecho que retrasa el proceso.

La falsa braga está formada por un conjunto de jardines que hay bajo el paseo arqueológico que bordea parte de la estructura de la época romana, que van desde el Campo de Marte hasta el Roqueral. Tal como explica Xavier Puig, el paseo de la falsa braga es una parte de la ciudad que muy poca gente ha pisado porque el Arzobispado la ha mantenido cerrada: «Cuando entras, es una zona muy novelesca, como si el tiempo no hubiera pasado». Es por eso que la oportunidad de conseguir abrir en la ciudad este paraje fue vista con buenos ojos desde el Ayuntamiento.

De hecho, para Xavier Puig, es una cuestión que juega a favor del objetivo a que quiere asumir el nuevo Plan de Ordenación Urbanística Municipal (POUM) de poner en el centro al peatón y conseguir más espacios para andar, dejando el vehículo motor en un segundo o tercero plano. «Si alcanzamos el pacto y el paseo se abre al público, los visitantes podrán hacer un recorrido circular pasando por encima de la muralla y bajando por la falsa braga». De hecho, la intención del consistorio era incluir este pacto –la apertura del nuevo hotel y del paseo de la falsa braga– en las Normas Urbanísticas provisionales que se aprobaron el pasado mes de noviembre. A pesar de eso, la lentitud en la toma de decisiones por parte de la entidad eclesiástica provocó que no llegaran a tiempo. «Nosotros teníamos prisa en aprobar este instrumento temporal mientras se tramita el POUM. A pesar de tener aquel sí del Arzobispado y de Madrid, el Vaticano nos pidió unos años para estudiarlo. Pues hemos tenido que esperar y lo incluiremos en el nuevo POUM», asegura Puig.

Un hotel de lujo

Ante el poco uso que se le ha dado al Seminario en los últimos años, el Arzobispado decidió buscar alternativas para sacar algún tipo de beneficio a favor suyo. «Ya no hacen nada y también les cuesta dinero mantenerlo. Por lo tanto, es totalmente lícito que quieran buscar alguna salida», apunta Puig. Así, la solución que encontró la institución eclesiástica fue convertirlo en un nuevo hotel de lujo.

Es por este motivo que, viendo los intereses que hay por las dos bandas, este acuerdo sería un «trato de favor», según el conseller. «El Ayuntamiento tiene la potestad de dar el consentimiento para abrir el hotel» y, por este motivo, piden este intercambio.