Infraestructura
La PortTarragona Terminal Guadalajara-Marchamalo avanza a buen ritmo
Durante la primera fase de las obras, ya casi lista, se han llevado a cabo tareas de movimientos de tierras
La PortTarragona Terminal Guadalajara-Marchamalo avanza a buen ritmo
La nueva terminal proyectada por el Port de Tarragona entre los municipios de Guadalajara y Marchamalo encara la recta final de la primera fase de obras después de casi 11 meses de su inicio. Las principales tareas que ha llevado a cabo la empresa encargada de las obras, Vías y Construcciones S.A., han sido de movimiento de tierras.
Las obras de esta primera fase han consistido primeramente en el desbrozado de 157.000 m2 de terreno. Seguidamente se realizaron las excavaciones para nivelar las diferentes zonas de explanada, donde posteriormente irá la plataforma y las vías de carrega/descarrega, en las cotas pertinentes. Durante estas excavaciones se movieron un total de 166.000 m3 de tierras.
La parte final de esta fase constructiva ha consistido en el movimiento de tierras donde se ha colocado un terraplén de altura variable por el futuro pavimento.
Actualmente la empresa constructora se encuentra acabando con la compactación de las 12 hectáreas de explanada, la instalación de 900 m lineales de cierre perimetral plataforma con muro de hormigón y con red metálica en la zona paralela a las vías de ADIF y la colocación de 600 m de colectores para la recogida de aiguas.
Segunda fase
El Port Tarragona ya se encuentra en la fase final de la redacción del proyecto para la segunda fase de obras de la PortTarragona Terminal Guadalajara - Marchamalo. Al acabar la primera fase se empezará la urbanización de la terminal, donde se hormigonará la explanada, se instalará el alumbrado y se realizarán las conexiones ferroviarias una con dirección Zaragoza y la otra dirección Madrid. El plazos previstos con los cuales trabaja el Port Tarragona para la realización de esta segunda fase es de 12 meses a partir de su inicio, que se espera sea antes de acabar el año, una vez se licite.
La conexión con la Terminal Intermodal de la Boella, en Tarragona, permitirá ofrecer la plataforma como nodo de cambio de ancho cuando se conecte con el ancho UIC del corredor del Mediterráneo. Incrementando así los tráficos ferroviarios intermodales (marítimos y terrestres) con su hinterland y expandir este hacia Madrid y la zona centro del estado.